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Cazadores alcanzan a cazadores en Argentina


ESQUINA, Argentina (BP)–El pastor de Arkansas y el pastor de Argentina se miraron el uno al otro con incredulidad. Dios estaba guiando sus corazones en la misma dirección, aunque eran de diferentes partes del continente y de diferentes culturas y hablaban diferentes idiomas.

“Hay momentos cuando simplemente no sabes qué decir porque es obvio que Dios tiene el control,” dijo Chuck McAlister, ex directivo de la Junta de Misiones Internacionales procedente de la Iglesia en Crossgate Center en Hot Springs, Arkansas. “Este es uno de esos momentos.”

El pastor Héctor Barolin estuvo de acuerdo.

“Lo que llegó a mi corazón fue que aquí había una amistad como la de David y Jonatán,” dijo Barolin, quien dirige la Iglesia Jesús, Luz a las Naciones en Esquina, Argentina. “Y eso fue lo que compartí con el pastor Chuck. Realmente siento que esto es algo que va a perdurar.”

McAlister, pastor pensionado que auspicia un programa televisivo de evangelismo para cazadores, fue a Argentina con tres familias de la Iglesia Bautista Trinity de Apopka, Florida, para unirse con los misioneros de la IMB, David y Alisha Holt de la Iglesia Bautista Mount Zion de Snellville, Georgia. Los Holt ministran a los criollos del norte de Argentina que trabajan principalmente como guías y guardas de alojamiento en la industria de la caza y la pesca.

El propósito de los voluntarios era edificar las relaciones con la gente que encontraban mientras disfrutaban las oportunidades de la caza y la pesca de la región. La estrategia de evangelizar a hombres a través de sus pasatiempos es una de las que McAlister describe como alcanzar una “afinidad de interés.” Aunque los cazadores de Argentina son de diferente cultura, él dijo que probablemente tiene más en común con ellos que con algunas personas en EE. UU.

“Supongo que la gente del campo es mi gente, y no me importa si viven en el sur de Georgia o en Sudamérica,” dijo McAlister con una sonrisa irónica. “Cualquier grupo que usted encuentre que tenga afinidad de intereses que una a la gente, creo que es nuestra responsabilidad aprovecharlo y usarlo para promover el Reino de Dios e impactar al perdido.”

En una fría y mojada mañana, los voluntarios estadounidenses y los Holt se reunieron con Barolin y con otros líderes de Jesús, Luz a las Naciones en el edificio de su iglesia. Cuando el grupo se sentó en el blanco concreto del santuario, compartieron tazas de mate caliente — una especie de té muy popular en Sudamérica — y McAlister compartió su profundo deseo de alcanzar hombres a través de actividades al aire libre.

“Nosotros estamos haciendo lo mismo,” dijo Barolin. “En esta iglesia tenemos miembros que son cazadores y pescadores y ellos están en contacto con hombres de la misma manera que ustedes lo están.”

McAlister casi se queda sin habla.

“Ustedes están haciendo esto para los hombres en su ministerio. Nosotros lo estamos haciendo para los hombres en EE. UU.,” dijo McAlister. “Esto no es un accidente.”

Mientras los dos hombres continuaban compartiendo sus sentimientos, se hacía claro que Dios había orquestado su encuentro de manera que pudieran trabajar juntos.

“Hemos estado sintiendo ya por un tiempo que Dios nos está diciendo que algo nuevo viene,” dijo Barolin. “Y va a ser grande. Estoy emocionado de comenzar a soñar juntos acerca de lo que Dios va a hacer.”

Tanto Barolin como McAlister han encontrado que las actividades al aire libre son una herramienta eficaz de evangelismo porque muchos hombres son más propensos a aceptar una invitación a ir a un viaje de cacería que ir al servicio de una iglesia.

“Digamos que ellos llegan al servicio de la iglesia,” dijo McAlister. “¿Y qué estamos haciendo? Estamos cantando canciones de amor a un hombre. Los estamos escoltando hacia un grupo pequeño donde alguien pueda que se quebrante y llore. O se les pide que se tomen de la mano de otros hombres para formar un círculo y orar. Y estos hombres se sienten incómodos porque ese no es el mundo en el que viven. Creo que sin darnos cuenta, hemos afeminado mucho lo que hacemos en la iglesia hoy en día.”

Uno de los mitos en la cultura local es que los verdaderos hombres no necesitan a Jesús, dijo Alisha Holt.

“Tristemente, el ícono predominante de Jesucristo a través de la tradición católica es ya sea el niño Jesús en los brazos de María o el cuerpo muerto de Jesús en los brazos de María. Y los verdaderos hombres simplemente no quieren eso,” dijo Holt.

Muchos hombres — tanto estadounidenses como argentinos — no conocen al Jesús de la Biblia, dijo McAlister. Ellos no conocen al hombre que caminó sobre las olas o tiró las mesas en el templo. Sin embargo, cuando se encuentran con otros hombres a los que les gustan los deportes al aire libre y que aman a Jesús pero todavía son “verdaderos hombres que cazan y pescan y pueden manejar una pistola y un cuchillo y un bote,” el masculino Jesús de la Biblia comienza a entrar en el enfoque, dijo McAlister.

Pero Barolin y McAlister han puesto su mirada más allá de estos hombres, ellos quieren alcanzar a las familias completas.

“Vemos al padre como la roca de la familia,” dijo Barolin. “Y nos damos cuenta que si podemos alcanzar a la cabeza de la familia, la familia es más fácil de ganar también.”

Al llevar familias desde EE. UU., McAlister espera modelarles a los hombres argentinos que “hay una responsabilidad que ellos tienen hacia sus familias, que ellos pueden ir a Jesucristo personalmente y que ellos pueden ser los líderes espirituales de su familia.”

Mientras estaban en Argentina, las familias voluntarias pasaron tiempo con los miembros de Jesús, Luz a las Naciones. Los hijos asistieron a las reuniones de los jóvenes donde hubo bailes y juegos, y Barolin invitó a McAlister a compartir un mensaje con su congregación.

El siguiente paso es planear cómo las familias estadounidenses pueden trabajar estratégicamente con la iglesia de Barolin. Pero el compañerismo ha sido establecido

“Realmente creo que este es el trabajo de Dios,” dijo Barolin. “He visto respuestas a oraciones y he visto las manos de Dios en esto.”

McAlister estuvo de acuerdo.

“He encontrado a mi hermano latinoamericano,” dijo McAlister. “¿Dónde comenzamos?”
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Tristan Taylor escribe para la Junta de Misiones Internacionales y vive en las Américas. Para ver el paquete multimedia relacionado con esta historia, vaya a www.commissionstories.com/stories/1313. Para ver videos relacionados a esta historia, haga clic en los enlaces que se encuentran a continuación:
Título: Then that’s what we’ll do (Entonces eso es lo que vamos a hacer)
http://www.imb.org/main/downloads/embedvideos.asp?flashvars=mvid=12375&mvidext=flv
Título: I don’t see color (No veo color)
http://www.imb.org/main/downloads/embedvideos.asp?flashvars=mvid=12376&mvidext=flv

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  • Por Tristan Taylor