Jeana y yo estábamos en los mediados treintas cuando ella fue diagnosticada con cáncer. Su diagnóstico nos movió a buscar a Dios, y orar fue nuestra primera elección, no nuestra última. Ambos aprendimos mucho de la oración a través de esa experiencia. Ante todo, aprendimos que la falta de oración no debe prevalecer en la vida de un creyente. Cada seguidor de Cristo necesita orar con confianza, y cada iglesia necesita orar con poder.
Las Verdades Teológicas Profundas Son Fundamentales para la Oración
El fundamento de un edificio frecuentemente va mucho más profundo que la superficie. Entre más grande la estructura, más profundo y amplio debe ser el fundamento.
El mismo principio se aplica a la oración. La confianza en la oración ocurre cuando se edifica sobre el carácter de Dios, su soberanía, su obra como Padre, Hijo y Espíritu Santo, y su gran y poderoso poder.
Cuando creemos estas profundas verdades teológicas, esto fortalece nuestra confianza en el poder de la oración.
Cinco Principios de las Escrituras en los que Sus Oraciones Pueden Permanecer
Dios nos ama tanto que muestra innumerables maneras de orar por situaciones específicas de la vida. Aquí hay cinco ejemplos:
- Batallas
En 2 Crónicas 20, el rey Josafat y el pueblo de Dios estaban rodeados por sus enemigos y enfrentaban una derrota inevitable. Entonces el Espíritu de Dios vino sobre un hombre llamado Jajaziel, y él declaró: “No teman ni se acobarden ante esa gran multitud, porque la batalla no es de ustedes sino de Dios”. 2 Crónicas 20:15
En respuesta a sus oraciones, Dios envió un estado de confusión entre sus enemigos el cual causó que pelearan entre ellos y se destruyeran a sí mismos.
Principio Bíblico: Denle sus batallas a Dios. No son de ustedes, sino de Dios.
Siempre recuerden: Dios está con ustedes.
- Milagros
¿Necesitan que Dios haga algo en su vida, familia, carrera, estudios, iglesia o nación que solamente Él puede hacer? ¿Necesitan un milagro?
Después de entrar a la Tierra Prometida, el pueblo de Dios tuvo que quitarles la tierra a sus enemigos. Josué llamó a Dios y le pidió que hiciera algo que solo Él podía hacer. “Detente, sol, en Gabaón…” Josué 10:12-14. Dios detuvo el sol, en respuesta a la audaz oración de Josué. El Señor peleó por Israel y les dio la victoria.
Principio Bíblico: Dios, el Creador, paró al sol y a la luna en respuesta a la oración de un hombre.
Siempre recuerden: Dios puede hacerlo todo. Por fe, pídanle a Dios que haga un milagro en su situación y denle la gloria a través de ello.
- Sanación
Nuestro cuerpo se está deteriorando aun ahora. Aunque la salud y el estado físico pueden mejorar nuestra vida, solamente Dios determina nuestros años.
En 2 Reyes 20, el rey Ezequías cayó terminalmente enfermo. Cuando Ezequías enfrentó esta sombría realidad entonces, “Ezequías volvió el rostro hacia la pared y le rogó al Señor” 2 Reyes 20:2 (NVI). ¡Dios añadió 15 años a la vida del rey!
Principio Bíblico: Hay momentos en los que nos enfermamos gravemente, y Dios nos sana porque su propósito para nuestra vida todavía no está completo.
Siempre recuerden: Dios puede sanarlos aquí en la tierra, pero Él los sanará completamente en el cielo un día.
- Otros
¿Deseas orar efectivamente por otros? Frecuentemente, solo oramos por otros cuando hay una crisis. ¿Cómo pueden orar diariamente por sus pastores, líderes de iglesia, amigos, miembros de la familia, y otros?
El apóstol Pablo escribió: “…no hemos cesado de orar por ustedes, pidiendo que sean llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual” Colosenses 1:9 (NBLA).
Principio Bíblico: Oren por otros para que sean llenos del conocimiento de la voluntad de Dios, para que tengan la perspectiva de Dios, y para que integren su vida bíblicamente, espiritualmente y prácticamente.
Siempre recuerden: Dios espera que oren los unos por los otros.
- Puertas abiertas
Pablo animó a los seguidores de Cristo en Colosas a orar por oportunidades. Él escribió: “Oren al mismo tiempo también por nosotros, para que Dios nos abra una puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo…” Colosenses 4:3 (NBLA).
Esta es una poderosa petición. Las escrituras detallan momentos en la vida de Pablo cuando Dios cerró las puertas o le dijo a Pablo que no necesitaba ir donde había planeado. Pablo quería oportunidades para promover el evangelio, no para ganancia personal.
Principio Bíblico: Pídanle a Dios que abra puertas de manera que puedan promover el evangelio más efectivamente.
Siempre recuerden: Profundicen su caminar con Dios y Él les ampliará la influencia.
Cualquiera que sea su situación, hablen con Dios sobre ella. Busquen las escrituras. Afírmense en Su Palabra cuando oren. Por fe, crean que Dios puede hacer más en un momento de lo que ustedes pueden hacer durante toda su vida.
Siempre recuerden esto: Cuando oramos, dependemos de Dios. Cuando no oramos, dependemos de nosotros mismos.
Ahora es el momento de liderar.
