NASHVILLE, Tenn. (BP)–El uso de drogas antidepresivas en los Estados Unidos casi se ha duplicado en años recientes, esto según un estudio dado a conocer en Archives of General Psychiatry en agosto.
“Aumentos significativos en el uso de antidepresivos fueron evidentes en todos los grupos sociodemográficos examinados, excepto entre los afroamericanos,” escribieron para esta revista especializada Mark Olfson de Columbia University y Steven Marcus de University of Pennsylvania.
Hoy en día los antidepresivos son el tipo de medicamento más recetado en los Estados Unidos. En 1996, se les recetaron antidepresivos a casi 6 millones de personas, lo equivalente al 6 por ciento de la población. Para el 2005, más del 10 por ciento o 27 millones de personas obtuvieron una receta de drogas antidepresivas durante el curso del año.
Lo que pudiera sorprendernos es que la mayoría no estuvo bajo un tratamiento para la depresión. La mitad de las personas que están tomando antidepresivos los utilizan para aliviar el dolor de espalda, dolor de los nervios, fatiga, dificultad para dormir u otros problemas, dijo el estudio.
Olfson dijo que sí esperaba encontrar un aumento en el uso de los antidepresivos, pero no esperaba que fuera tan grande como lo fue. Él lo atribuye en parte a que el tratamiento de la salud mental se está volviendo más aceptable socialmente, y expresó su preocupación de que la medicina se esté recetando a la ligera, según WebMD.
El estudio también reveló que menos personas que están usando antidepresivos también están participando en psicoterapia. En 1996, 31.5 por ciento de quienes fueron entrevistados también asistían a terapia verbal, pero en el 2005 esa porción había disminuido al 19.8 por ciento.
Los autores del estudio dijeron que la baja en las visitas al consultorio pudieran ser atribuidas a los costos que no cubre el seguro médico por la terapia y a la menor cobertura de los seguros para tales visitas. Es más fácil y más barato dar una receta y tomarse una pastilla diariamente que ver con frecuencia al terapeuta, señalaron algunos comentaristas.
El desarrollo de nuevos antidepresivos y la mayor publicidad que han tenido también pudieran haber contribuido al aumento en su uso, dijo Olfson. Reuters reportó que en el 2008 se dieron más de 164 millones de recetas para antidepresivos, dando un total de $9,600 millones en ventas en los EE UU y marcando grandes ganancias para la industria farmacéutica.
Algunos profesionales médicos advierten en contra de seguir la corriente al aumento del uso de los antidepresivos.
“¿Realmente quién está tomando estos medicamentos?” preguntó Eric Caine, director del departamento do psiquiatría y codirector del Centro para el Estudio de la Prevención del Suicidio en el Centro Médico de University of Rochester. “No está claro que han mejorado la salud de alguien. Este es un asunto fundamental que aún ignoramos. No contamos con alguna manera de decir si han mejorado la vida de la gente.”
LA DIÓCESIS CONSIDERA A LOS HOMOSEXUALES PARA SER OBISPOS — A unas semanas de la Iglesia Episcopal derogara una prohibición para ordenar obispos a personas que sean abiertamente homosexuales, por los menos dos diócesis están tanteando el terreno.
La Diócesis de Los Ángeles, la cual representa a 70,000 episcopales y es considerada una de las más liberales en los Estados Unidos, anunció el 2 de agosto que un sacerdote abiertamente homosexual y una sacerdotisa abiertamente lesbiana han sido nominados junto con otros cuatro candidatos para ocupar en diciembre los dos puestos vacantes de obispos.
En Minnesota, una sacerdotisa abiertamente lesbiana es una de los tres candidatos para obispo en ese estado. En una declaración dada a conocer el 1 de agosto, ella llamó a los episcopales a “ser testigos del Evangelio de Jesucristo que cambia la vida de las personas y proclama la profunda inclusión y hospitalidad de Dios.”
Después de la controversial ordenación del Obispo Gene Robinson en el 2003, la Iglesia Episcopal había prometido ejercer moderación antes de ordenar a más homosexuales. Pero en julio, durante su convención en California, votaron abrumadoramente a favor de abrir “cualquier ministerio ordenado” a los homosexuales y convinieron en considerar rituales de bendición para parejas del mismo sexo.
Los comentadores conservadores dijeron que las nominaciones más recientes aumentarán la tensión con la Iglesia Anglicana a nivel mundial, la cual ha advertido en repetidas ocasiones que está en contra de marchar en esa dirección.
Según le diario The Chicago Tribune, Kendall Harmon, un teólogo de la Diócesis de Carolina del Sur, calificó a la nominación de California como “otro ejemplo de desafío y falta de moderación” por parte de la Iglesia Episcopal, la cual cuenta con 2 millones de miembros en el mundo.
EN PICADA LA MEMBRESÍA PRESBITERIANA — La Iglesia Presbiteriana EUA (Presbyterian Church – USA) sufrió su mayor baja en membresía en 25 años, perdiendo a casi 70,000 personas en el 2008.
En Louisville, Ky., los oficiales de la iglesia anunciaron este verano que hoy en día su membresía total es tan sólo de 2 millones, en más de 10,000 congregaciones. “Casi 104,000 personas se unieron a la IP-EUA el año pasado, pero esas buenas noticias fueron más que nubladas por los 34,1001 presbiterianos que murieron, los 34,340 que eran miembros de las 25 congregaciones que abandonaron la IP-EUA para irse a otras denominaciones, y la asombrosa cantidad de 104,428 miembros que fueron borrados de las listas por sus sesiones sin que, aparentemente, se unieran a otra iglesia,” dijo Presbyterian News Service.
Jack Marcum, el coordinador de servicios de investigación de la denominación, dijo que la causa principal del declive es demográfica. Como en otras denominaciones, las bancas están llenas en su mayoría de personas de edad avanzada y menos de jóvenes. Comparados con los 34,000 funerales presbiterianos del año pasado, la iglesia registró menos de 26,000 bautismos de niños, dijo Marcum al diario The Tennessean en Nashville.
Marcum también señaló que los presbiterianos “rehúyen el evangelismo” y sólo añadieron unos 6,000 nuevos miembros a través de bautismo de adultos durante el año pasado. También está sufriendo la plantación de iglesias, dijo el periódico mencionado.
“Desde la década de 1960, se han comenzado menos iglesias nuevas, así que la mayoría de las iglesias presbiterianas no se localizan en centros donde la población va creciendo,” dijo The Tennessean. “El año pasado la denominación sólo comenzó 30 iglesias nuevas, o una por cada 330 iglesias más o menos. La Convención Bautista del Sur, en cambio, comenzó una iglesia nueva por cada 30 iglesias establecidas.”
La mayoría de las personas que han abandonado la Iglesia Presbiteriana no necesariamente se han unido a otra denominación. Parecen haber dejado de asistir a la iglesia, dijo Marcum, quien añadió “simplemente, la gente se está alejando de la iglesia.”
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Erin Roach es un escritor de Baptist Press.
