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CONSORCIO HISPANO: Sánchez pondera cómo ve Jesús las multitudes hispanas


NASHVILLE, Tenn. (BP)–“¿Qué ve Jesús cuando mira la multitud hispana?” preguntó el profesor de misiones Daniel Sánchez en la apertura del Consorcio Hispano 1-3 de octubre en Nashville, Tennessee.

Sánchez, del Seminario Teológico Bautista Southwestern, y líderes de otras diferentes entidades bautistas del sur se reunieron en un modesto salón de banquetes de Recursos Cristianos LifeWay para discutir el ministerio a millones de hispanos que actualmente viven en EE. UU. y alrededor del mundo.

Sánchez correlacionó la experiencia de Jesús con las multitudes perdidas de Mateo 9 con las actuales necesidades y condición de la multitud hispana en la cultura de hoy en día.

“Cuando Jesús ve la multitud hispana, ve una multitud que sigue creciendo rápidamente,” dijo Sánchez, haciendo notar que la población hispana creció 11 veces de 1950 al 2007, pasó de 4 millones a 45.4 millones. Desde 1980, la población se ha triplicado y se proyecta que se triplique de nuevo para el 2050, dijo.

Este crecimiento no ha sido accidental, dijo Sánchez, en relación con las posibilidades de ministerio para la Convención Bautista del Sur.

“El más rápido crecimiento de los hispanos está sucediendo donde los bautistas del sur son los más fuertes en el cuadrante bajo del sudeste,” señaló. “Esto me lleva a preguntar: “¡¿Es esto una coincidencia o está Dios preparando algo?!'”

Sánchez prosiguió reflexionando sobre las necesidades físicas de las multitudes galileas y dijo: “Jesús ve una necesitada multitud hispana — necesitada desde un punto de vista de necesidades físicas.

Un tercio de los niños hispanos viven en condiciones de pobreza, mientras que muchos hispanos son explotados, dijo Sánchez. “Se sienten desprotegidos. Están temerosos. Sienten la carga de buscar cómo ayudar a los suyos en su país de origen, cualquiera que este sea. Y ellos tienen tremendas necesidades físicas.”

Pasando a hablar de las necesidades espirituales de los hispanos, Sánchez dijo: “Muchos hispanos conocen a Jesús solamente como un indefenso bebé en los brazos de María o como un Cristo muerto. Eso es lo único que saben de Jesús. No conocen al Cristo vivo. No saben que pueden obtener libertad de la culpa del pecado; alivio del temor al juicio; gozo en su relación con Jesucristo. Viven a menudo una vacía vida de ritos que los lleva como ovejas — perdidos y confundidos.”

Sánchez relacionó la apertura de la multitud en la Biblia con la receptividad de los hispanos católicos al evangelio de Cristo.

“Los hispanos están respondiendo más al evangelio que nunca antes en la historia de este país,” dijo Sánchez. “Las encuestas indican que entre un 20 a un 25 por ciento de los hispanos se encuentran en la categoría de evangélicos o protestantes. Cuando yo era pequeño, recuerdo haber escuchado que un 2 por ciento de nosotros éramos evangélicos.”

Refiriéndose a un estudio reciente, Sánchez dijo que el 42 por ciento de los hispanos católicos tienen una opinión favorable de los evangélicos, mientras que un 50 por ciento de todos los hispanos católicos están buscando una relación más personal y directa con Dios que la que encuentran en las prácticas de su religión.

“Esto me dice que son más receptivos al evangelio que nunca antes,” dijo Sánchez.

En contraste, Sánchez señaló del mismo estudio que el 36 por ciento de los hispanos evangélicos tiene una opinión desfavorable de los hispanos católicos. Rápidamente confirmó que las diferencias doctrinales son importantes y animó a los evangélicos a ver la multitud hispana a través de los ojos compasivos de Jesús.

“En la boca del estómago, Jesús sintió el dolor de la multitud,” dijo Sánchez. “Me pregunto si nuestro mayor desafío no sería que nuestra propia familia hispana sintiera la compasión de Jesús. Lograr que los miembros de nuestra propia iglesia sean entrenados y sean sabios en la manera en la que presenten el evangelio.”

En la historia de Mateo 9, dijo también Sánchez que Jesús vio las multitudes sin liderazgo, como ovejas perdidas. De la misma manera en la que Jesús animó a orar para que obreros fueran enviados al campo, Sánchez animó a los miembros del consorcio a redoblar los esfuerzos en oración y a darse cuenta que ellos podrían ser la respuesta a la oración de trabajar juntos ministrando la población hispana.

“Mi oración es que cuando pensemos en la multitud hispana, veamos a través de los ojos de Jesús y respondamos apropiadamente, sabiendo que el mismo Salvador que nos dio este reto estará con nosotros en cada paso del camino. Y en el futuro, miles de personas le darán gracias al Señor porque nosotros fuimos fieles.”
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  • Por Jenny Wingard