WASHINGTON (BP)–Por sexto año consecutivo la administración de Bush ha negado el envío de capital federal hacia un controversial fondo de planeación familiar de la Organización de las Naciones Unidas que apoya el programa de control de población obligatorio en China.
El Congreso ha designado $34 millones para el Fondo de Población de la ONU (UNFPA, por sus siglas en inglés), pero el Departamento de Estado determinó de nuevo, tal como lo ha hecho desde el 2002, que otorgar fondos a dicha organización violaría una ley de 1995. Esta medida, conocida como la enmienda Kemp-Kasten, prohíbe que el dinero destinado a la planeación familiar vaya a entidades que, como el presidente lo decidió, “apoyan o participan en el manejo de un programa de abortos forzados o esterilización involuntaria.”
Por casi tres décadas los oficiales en muchas partes de China han practicado un programa de planificación familiar forzado como un intento por disminuir la tasa de nacimientos en el país más poblado del mundo. Una ley que codifica la política por toda China entró en vigor en el 2002, aunque el gobierno nacional prohíbe la coerción física para realizar abortos o esterilizaciones.
La política limita a las parejas que viven en las áreas urbanas a tener sólo un hijo y dos a las que viven en las áreas rurales, si es que el primero fue una niña. Otras excepciones se han hecho en algunas provincias y la aplicación de la política ha variado de región en región. Los castigos por violar esta política han incluido desde multas, arrestos y destrucción de casas, hasta abortos forzados y esterilización. También se han reportado infanticidios, especialmente de niñas.
El Subsecretario de Estado John Negroponte dijo a través de una carta del 6 de septiembre que ha determinado que “UNFPA apoya el programa de aborto forzado y esterilización involuntaria del gobierno de China” a través de la provisión de “recursos financieros y técnicos” para la Comisión Nacional de Planeación Familiar y de la Población en Beijing y para otras agencias. Negroponte comunicó su decisión en una carta dirigida al Rep. David Obey, demócrata de Wisconsin, director del Comité de Apropiaciones de la Cámara de Representantes.
UNFPA ha negado las acusaciones de que apoya los programas obligatorios, pero un equipo de investigaciones del Departamento del Estado reportó en el 2002 que la UNFPA proveyó computadoras y vehículos a los oficiales chinos a cargo del control de población.
“Desde el 2002, hemos tenido numerosas discusiones con el [g]obierno de China para instarlo a que termine su programa de aborto forzado y esterilización involuntaria,” escribió Negroponte. “La [a]dministración ha exhortado a IUNFPA y a China en repetidas ocasiones a que reestructuren el programa de UNFPA para que no apoye o participe en el manejo del coercitivo programa de China. A pesar de estos esfuerzos, no ha habido un cambio significativo en las circunstancias de la participación de la UNFPA en China.”
Los partidarios a favor de la vida aclamaron tal decisión.
“Una vez más, el Presidente Bush ha subrayado su compromiso con la santidad de toda vida humana, comenzando desde la concepción,” dijo Richard Land, presidente de la Comisión de Ética y Libertad Religiosa de los Bautistas del Sur.
Wendy Wright, presidenta de Concerned Women for America, dijo en un comunicado de prensa, “Es atroz que los congresistas insistan en financiar esta espantosa agencia que abusa de las mujeres. Estamos agradecidos con el Presidente Bush y su personal por confrontar y corregir un error al otorgar dinero a UNFPA, [organización] en contra de las mujeres y de los niños.”
La decisión del Departamento del Estado fue comunicada el mismo día que el Senado votó 48-45 para restaurar la enmienda Kemp-Kasten a la propuesta de ley de gastos de Operaciones en el Extranjero. La medida de apropiaciones había llegado al piso del Senado sin la antigua política a favor de la vida. El Senado aprobó la legislación general de gastos con una votación de 81-12.
La enmienda lleva el nombre de los representantes republicanos Jack Kemp de Nueva York y Robert Kasten de Wisconsin, quienes patrocinaron la medida a mediados de la década de 1980.
Tal como la ley lo requiere, el Departamento de Estado transferirá más de $22 millones de los $34 millones designados en su año fiscal para la UNFPA al Fondo para Programas de Supervivencia y Salud Infantil, dijo Negroponte. Ese fondo es parte de la Agencia para el Desarrollo Internacional de EE UU.
La participación de UNFPA en el programa de China ha causado cierta notoriedad para una agencia que provee asistencia de planeación familiar a más de 150 países.
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Compilado por Tom Strode, jefe del Washington Bureau para Baptist Press.