[1]NOTA DEL EDITOR: La Ofrenda de Navidad Lottie Moon suplementa las donaciones al Programa Cooperativo para así apoyar a más de 5,600 misioneros bautistas del sur que comparten el Evangelio en otros países. Este año, la meta de la ofrenda son $175 millones. El tema de la ofrenda Lottie Moon 2009 es “¿Quién falta? ¿Quién irá?” y se enfoca en vencer las barreras que impiden que se escuche y se acepte el Evangelio en varias partes del mundo y en la misión que la Gran Comisión nos dio a todos los cristianos para “id y haced discípulos a todas las naciones.” La Semana de Oración por las Misiones Internacionales 2009 está programada del 29 de noviembre al 6 de diciembre. Puede encontrar recursos en inglés sobre la ofrenda yendo a www.imb.org/offering y en español yendo a www.hispanos.imb.org/lottie.
RICHMOND, Va. (BP)–A primera vista no parece una cruz. En forma de diamante, está oscurecida bajo decoraciones y grabados ornados.
Los líderes religiosos llevan colgadas estas cruces mientras guían a más de 42 millones de etíopes cada semana en oración, cantos y memorización de versículos. Esto no suena tan diferente de lo que se hace en muchas iglesias en los Estados Unidos.
Pero mire más de cerca.
Detrás de los rituales se encuentra una religión construida sobre la adoración de santos, ángeles e incluso demonios. La mayoría de los etíopes se consideran a sí mismos cristianos porque su religión incluye enseñanzas bíblicas y un entendimiento de Jesús, excepto que Él no es más que uno de mucho dioses en su mezcla de religiones. Ellos creen que hay más de una docena de caminos al cielo.
Su religión es similar a la cruz en forma de diamante, dijo Ed*, un obrero de la Junta de misiones Internacionales que ha compartido el Evangelio entre el pueblo etíope por más de una década.
[2]“Han añadido tanta decoración y adornos a [su religión] que ya no se ve la cruz,” dice.
Haffa*, un creyente local, sabe lo enterrado que puede llegar a estar el Evangelio.
Antes era un hombre religioso que practicaba las magias blanca y negra para bendecir y maldecir. Daba amuletos para proteger a la gente de los malos espíritus. También estudiaba las Escrituras y oraba a Jesús.
Un día un hombre le dijo a Haffa que Cristo era el único camino al cielo. Haffa se dio cuenta de que eran en vano sus esfuerzos por apaciguar a una gran variedad de dioses. Habló con este hombre varias veces antes de decidir poner su fe solamente en Cristo. Luego quemó sus libros de magia.
Con una población de más de 82 millones, Etiopía tiene menos de un 1 por ciento de evangélicos.
La mayoría de la gente no entiende los rituales y oraciones en los que participa, dice Gabriel*, otro creyente local. Ellos adoran, cantan y escuchan sermones predicados en un idioma antiguo que no entienden. Más del 90 por ciento son analfabetos, permitiendo que muchos líderes religiosos manipulen el Evangelio. Para muchos etíopes, sus creencias religiosas son simplemente culturales.
“Tener una cultura es bueno, pero si no hay Dios, no tiene caso,” dice Gabriel.
Pero hoy en día muchos etíopes están más receptivos ante la verdad de Dios—aunque con sus límites.
Ed y su esposa Renne* han descubierto que la mayoría de la gente está abierta a hablar acerca de asuntos espirituales. Sin embargo, se resisten ante las influencias exteriores que intentan sacarlos de sus propias creencias.
Renee recuerda a un hombre hace años que le preguntó por qué ella y su esposo habían venido al país. Ella le contestó que estaba allí para contarles de Jesús.
“Si piensan que están aquí para cambiar nuestra religión, te van a rechazar de inmediato,” Renee dijo. “[Ellos piensan,] ‘¿Por qué un extranjero piensa que va a venir a Etiopía a enseñar a alguien sobre Jesús?'”
Estos días Ed y Renee aplican un método cuidadoso al que denominan “evangelismo paralelo,” dijo Renee.
“Nosotros decimos, ‘¡Oh, también eres cristiano!'” dice. “‘¿Cómo expresas tu fe?'”
Con el tiempo, la pareja comparte más y más acerca de Jesús y cómo impactó sus vidas.
“Solamente apuntamos hacia la cruz continuamente,” dijo Ed.
Al paso del tiempo, las vidas se transforman.
“Ellos vienen a ti con una lista con todos los nombres de sus familiares, y dicen… ‘Quiero que ores por estas personas,'” dice Renee.
Con frecuencia, dejar el camino de la antigua religión conlleva a la persecución.
“Supón que quedas herido, es el tiempo de la cosecha, y tus familiares –la gente en tu comunidad- te abandonan y te etiquetan como un hereje.
“¿Qué vas a hacer?” pregunta Renee. “Eso significa que tus hijos van a morir de hambre. Son situaciones reales de vida o muerte lo que la gente tiene que enfrentar.”
A pesar de las presiones para no creer, la verdad de la historia de Jesús está ahí justo en frente de sus ojos, dice Renee.
“La historia proviene de uno de sus propios libros sagrados — la Biblia.”
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*Los nombres reales han sido cambiados. Este es un reportaje del staff de la Junta de Misiones Internacionales.