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EDITORIAL: Agradecidos por su bondad

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HOLLYWOOD, Fla. (BP) — “Den gracias al Señor, porque El es bueno; Porque para siempre es Su misericordia” (Salmos 107:1 NBLH).

Se acerca del día de acción de Gracias y siempre para nosotros los creyentes este es un tiempo especial para meditar en las bondades de Dios a lo largo del año con gratitud sincera (Colosenses 3:16).

Es una realidad que para el mundo en general, el año que está casi concluyendo ha sido un año difícil con muchas presiones y vicisitudes. No obstante, el Señor ha permanecido fiel para con sus hijos (Juan 1:12; Gálatas 4:6). Y estos deben ser recíprocos con El, agradecidos por su amor incondicional.

Su amor para con sus redimidos, los que El compró con su propia sangre es inexhaustible, inagotable, incalculable e imperecedero (cp. Hechos 20:28; Romanos 8:33-39; Efesios 1:7)

El salmista David, nos motiva a que continuamente demos gracias al Señor porque El es bueno y por que su misericordia (i.e. su bondad y su amor de pacto) para con sus redimidos, es para siempre.

El Señor manifiesta su bondad sobre la base de su amor leal y de pacto para con los suyos (Hebreos 9:15).

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Es por esto que el Rey David nos guía a agradecer a Dios por su amor y afirmados en esa confianza nos motiva a que le alabemos en toda circunstancia (Salmo 34:1).

En el versículo 22 del Salmo 107, nos dice que los salvos quienes han sido y finalmente serán librados de todos sus temores, pruebas y aflicciones (Salmo 34:4,5) deben de ofrecer sacrificios de acción de gracias, aclamando al Señor aún por medio de sus canticos (cp. Efesios 5:19; Hebreos 13:15).

Salmos 107:22 Ofrezcan también sacrificios de acción de gracias Y hablen de Sus obras con cantos de júbilo.

David también nos anima a que descansemos en el hecho de que El Señor nos escucha y sabe como librarnos de lo que nos aflige en nuestras experiencias humanas.

Salmos 107:28 En su angustia clamaron al Señor y El los sacó de sus aflicciones.

Por todas estas razones en este tiempo les animo a que juntos recordemos que El Señor es nuestro proveedor y nuestra guía (107:5-7, 9), nuestro libertador (vv. 13-14), aquel que nos restaura por medio de su Palabra (v. 20) y aquel que cuida de todas nuestras necesidades (vv. 36-41).

El Rey David termina con una conclusión adecuada, en vista de todas estas realidades:

Sal 107:43 ¿Quién es sabio? Que preste atención a estas cosas, Y considere las bondades del Señor.

En este día de Acción de gracias particularmente (y aún de manera diaria y continua) les animo a que consideremos con atención las bondades del Señor.

Que tengan un feliz día de Acción de gracias.