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EDITORIAL: La Gran Comisión y la Iglesia local

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LAUREL, MD. (BP) — “Y Jesús se acerco y les hablo diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” Mateo 28:18-20

¿Se han fijado ustedes que algunas iglesias crecen y oras no? No se si se han puesto ha pensar el porque esto pasa. Aunque existen muchas razones, no podemos ignorar la falta de obediencia de la iglesia a la Gran Comisión.

Las ultimas palabras de una persona normalmente son palabras importantes que salen se lo mas intimo de una persona. Las ultimas palabras de Jesús fueron el primer mandato para el Cristiano. Estas ultimas palabras son el fundamento y plan esencial para el movimiento que sus discípulos iban a desarrollar después que Él ascendiera al cielo. Estas ultimas palabras las podemos encontrar en Mateo 28:18-20. Estas palabras son importantes por tres razones:

Primero, Jesús hace una declaración. Esta declaración forma la base solida de que lo que sigue esta basado en algo que es seguro. Jesús dijo, “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra.” La palabra “toda” es inclusive. No carece de nada. Este es la autoridad que el Dios Creador le ha dado a Jesús. Como tal, tiene derecho a controlar todo y también a deshacerse de todo. Aquí en este verso Jesús habla del poder para redimir y para defender y salvar a la iglesia que el redimió con Su sangre. Su obra mediadora se extiende sobre las cosas materiales, ángeles, demonios, sobre el inicuo, y sobre todo hombre.

El conocer que Cristo tiene “toda” autoridad nos debe de animar a estar activos en la obra del Señor conociendo que es Dios quien esta en control. Estamos parados en un fundamento firme que las impurezas del mundo, los ataques en contra de la Iglesia de Cristo, las persecuciones diabólicas, las amenazas y las censuras presente y por venir de gobiernos mundiales no podrán prevalecer en contra del Dios que tiene “toda” la autoridad. ¿Crees tu esto? ¡Vívelo!

Segundo, Jesús nos da un mandato. La iglesia neotestamentaria debe de tener un ministerio “centrífugo” en comparación al que vemos en el Antiguo Testamento que era un ministerio, primordialmente, “centrípeto.” El ministerio del Antiguo Testamento era primordialmente uno de atracción a venir a adorar en el templo. En comparación, el ministerio de la iglesia tiene que tener un enfoque hacia la comunidad. Por muchos años la iglesia en Norte América ha operado con la idea de que las personas vengan a la iglesia. El mandato de Jesús es claro, “Id.” ¿Practicas tu esto?

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Jesús, en su mandato nos exhorta a “id,” “hacer discípulos,” de todas las “étnias,” “bautizándolos,” y “enseñándoles.” Note usted cual es el currículo de lo que enseñamos. Nosotros instruimos al nuevo convertido antes del bautismo y después del bautismo con las doctrinas y enseñanzas de Cristo.

Es muy difícil, sino imposible, hacer estas cosas sin primero movilizar a la iglesia. ¿Cómo es posible que con tan grande crecimiento de la población — personas de todas las naciones viviendo a nuestro alrededor – que la Iglesia esta ignorando las oportunidades que Dios nos esta presentado hoy a nosotros?

Tercero, Jesús, nos da una promesa. La Gran Comisión comienza con una declaración de ánimo al Cristiano y termina con una promesa de aliento y esperanza para el Cristiano. Después de decirnos que el tiene “toda” la autoridad, y de enviarnos, ahora también nos dice, “…y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” ¿En qué ministerio de tu Iglesia estas activamente sirviéndole a Jesús? ¡Bendiciones!