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El escenario del PC presenta un panel de pastores hispanos para discutir cómo sacar a la iglesia de la crisis del COVID

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ANAHEIM, Calif. – Pastores hispanos de California, Florida y Texas discutieron estrategias para liderar a la iglesia en un mundo post-covid durante un panel organizado por el escenario del PC en la sala de exposiciones de la reunión anual de la Convención Bautista del Sur (SBC).

Luis López, director ejecutivo de relaciones hispanas y movilización del comité ejecutivo de la SBC, moderó en inglés el panel formado por Víctor Solorzano, Eloy Rodríguez y Tony Miranda.

Los pastores respondieron preguntas sobre cómo la pandemia de COVID-19 afectó sus ministerios, cómo se recuperaron y cómo están avanzando.

Solorzano, el pastor de Vida en Victoria en Bell Gardens, California, perdió a un querido anciano de iglesia por el virus, así como a siete miembros de su familia. Mientras guiaba a su iglesia a través de la pandemia, descubrió que volver a lo básico de la oración y el discipulado era la mejor manera de capear la tormenta.

“Adaptamos nuestros grupos pequeños y ofrendas para estar en línea y ahora tenemos más personas en grupos pequeños y más personas dando”, dijo.

Rodríguez, el pastor de Idlewild Baptist Church en Español en Lutz, Florida, dijo que a pesar de lo horrible que fue la pandemia, puso en la puerta de la iglesia la oportunidad de compartir el evangelio incluso más que antes. “La muerte estaba muy presente y hablar de la vida eterna era más fácil porque la gente estaba abierta a ella”.

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Entre 2020 y 2022, Idlewild Español plantó otras dos iglesias de habla hispana lo que testifica cómo el Señor se mueve incluso en las circunstancias más difíciles, compartió.

Miranda, pastor de la Primera Iglesia Bautista en Austin, Texas, dijo que la pandemia hizo que muchos miembros de la iglesia se fueran y nunca regresaran y expuso la necesidad de madurez espiritual en la iglesia. A medida que la iglesia salía de la crisis, evaluaron qué cosas conservarían y qué descartarían para que el ministerio fuera más efectivo.

“Estamos teniendo más cuidado de tener en cuenta a nuestra audiencia en línea mientras preparamos nuestros servicios de adoración”, dijo. Se han eliminado algunos ministerios, compartió, porque incluso antes de la pandemia no eran esenciales.

“Se trata de volver a lo básico”.

Y volver a lo básico ha demostrado ser una estrategia exitosa para estos pastores y sus iglesias. Los jóvenes están más involucrados en el ministerio a medida que asumen la responsabilidad de la tecnología de la iglesia, más personas participan en grupos pequeños a medida que se vuelven más accesibles durante la semana y las personas dan más ahora que pueden hacerlo fácilmente desde sus teléfonos.