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Los pro-vida levantan fondos para máquinas de ultrasonido

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WASHINGTON (BP) — Las máquinas de ultrasonido están salvando del aborto las vidas de bebés cuando mujeres que ven a su bebé por primera vez deciden darlos a luz, dijo Kelly Rosati durante la cena de Evangélicos por la Vida el 21 de enero.

“Estas son historias reales, gente real, vidas reales,” dijo Rosati, vicepresidenta de un alcance comunitario para Enfoque a la Familia, cuando los invitados vieron los videos que mostraban a las madres que decidieron continuar el embarazo. “¡Qué increíble honor es hablar en nombre de esos pequeñitos!”

Rosati fungió como maestra de ceremonias de la cena en el Hyatt Regency Washington, Capitol Hill. La noche antes de la 43ª Marcha por la Vida, más de 100 defensores de la vida asistieron al evento, celebrado en conjunto con la conferencia inaugural de Evangélicos por la Vida, auspiciada por la Comisión de Libertad Religiosa y Ética (ERLC) de la Convención Bautista del Sur y Enfoque a la Familia. David Platt, presidente de la Junta de Misiones Internacionales, dio el discurso de apertura.

Para el final de la noche, los líderes de denominación, senadores, líderes laicos, pastores y otros seguidores habían levantado fondos suficientes para comprar una o más máquinas de ultrasonido para que sean usadas en centros de crisis de embarazo. Este es un esfuerzo colaborativo del Proyecto Salmo 139 de la ERLC y el Programa de Opción de Ultrasonido de Enfoque a la Familia.

El pastor Nathan Lino de la Iglesia Bautista Northeast Houston, guió en oración. Lino, en una entrevista para BP temprano ese día, compartió cómo su iglesia oró por la oportunidad de ministrar a mujeres en situaciones de crisis de embarazo. Con una instalación de Planned Parenthood cerca de la iglesia, dijo Lino, la iglesia estaba dotada de una instalación. Y al cabo de poco tiempo, fueron contactados por un centro reproductivo integral cristiano que buscaba un lugar. Este acontecimiento Lino y su congregación lo describen como un milagro.

Durante la cena, el presidente de ERLC Russell Moore, junto con Jim Daly, presidente de Enfoque a la Familia, presentaron galardones a tres líderes pro-vida: Platt de IMB, la presidenta y directora ejecutiva de Estadounidenses Unidos por la Vida Charmaine Yoest, y el senador pro-vida James Lankford, (republicano de Oklahoma). Moore y Daly agradecieron a los receptores por su incansable defensoría a favor de la dignidad de la vida.

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Platt le dijo a la audiencia que el asunto del aborto es un asunto bíblico, un asunto de Dios, un asunto del evangelio. Platt compartió el remordimiento de que, por tanto tiempo, él estuvo “vergonzosamente silencioso y espantosamente pasivo” sobre el tema del aborto.

“Yo veía el aborto como un asunto político,” dijo. “Fallé al no darme cuenta que es un asunto bíblico.” De hecho, es una crisis, añadió.

“Miro la cara de mis cuatro hijos cuando los llevo a la cama en la noche, y es difícil imaginar 115.000 bebés introducidos al mundo ese día con una pastilla o una herramienta dirigida a su destrucción,” señaló Platt. “Y durante mucho tiempo pude omitir la irrefutable realidad.”

Platt señaló que es más que un asunto de niños y mamás — “es un asunto de Dios.” Él leyó del Salmo 139: “… Mis huesos no te fueron desconocidos cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo de la tierra era yo entretejido. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación…”

“El salmo 139 nos da un atisbo de lo que Dios ve en el vientre,” dijo. “Es una íntima conexión que Dios tiene con el niño.”

Platt dijo que Dios es el juez de los pecados de las madres que abortan a sus bebés, y de los doctores, líderes — incluyendo pastores que les aconsejan a mujeres tener abortos — y legisladores que hacen que el aborto sea posible.

No legislar moralidad es un “argumento vergonzoso,” dijo Platt. “La gente no puede robar. Le quitamos los derechos a la gente que escoge el mal. Es un suicidio cultural decir que cada cual puede escoger hacer lo que desee hacer.”

Es correcto de forma sabia, amable, firme, denodada, compasiva oponerse al aborto, dijo. “Nadie es pro-violación, asalto y rapto…,” dijo.

“La neutralidad política o moral no es una opción,” dijo. “Los cristianos que no han hecho nada acerca del aborto están bajo el juicio de Dios. Y yo he sido el primero de los pecadores.”

Pero hay gracia y perdón. Cualquiera que se haya practicado un aborto, o haya apoyado un aborto, o no haya hecho nada para prevenir los abortos puede recibir el perdón de Dios. “Permita que esto se albergue en su corazón y alma. Dios perdona completamente; en Cristo, ya no eres culpable,” dijo.

En el cierre, Moore de la ERLC, al referirse a la Marcha por la Vida el día siguiente (22 de enero), dijo: “Nos uniremos a muchos de nuestros aliados y amigos católico romanos que han estado liderando este movimiento de muchas diferentes maneras durante muchos años.”

Durante años, dijo Moore, evangélicas y católicas han estado juntas en las clínicas de abortos alrededor del país. No solamente orando afuera de las clínicas o como voluntarias, sino sentadas en las salas de espera.

“La mayoría de la gente asume que las clientas son personas pro-elección,” dijo Moore, pero eso no es cierto. Moore dijo que muchas chicas católica romanas dicen que saben que está mal, pero que Dios las perdonará a través de la confesión. Las chicas evangélicas dirán que saben que está mal, pero que confían en la filosofía de que “una vez salvas, siempre salvas.”

“Hermanos y hermanas, este es un asunto de fidelidad al evangelio,” señaló Moore. “Tenemos gente en nuestras iglesias que llegan a un punto de crisis y no llegan al liderazgo, buscan a alguien más que probablemente va a encontrar una manera de ‘arreglarlo.'”

“Una de las cosas que principalmente espero que salga de esta reunión es que tengamos un testigo unido de la visión de Dios de las mujeres y los niños en crisis y que nuestras iglesias puedan ser lugares de redención…,” dijo.