[1]RICHMOND, Va. (BP) — Los cristianos en los ministerios del cuidado de la salud están viviendo su fe mediante “palabra y hecho” en todo el mundo, y la gente está respondiendo.
Entre aquellos que toman la decisión de seguir a Jesús hay personas en lugares donde el mensaje del amor de Dios está llegando hasta ahora.
En Asia del Sur, una Escuela Bíblica de Vacacione ofrecida por la Primera Iglesia Bautista de Lafayette, Louisiana, compró artículos de higiene y salud que pueden ser usados por pacientes con enfermedades terminales, junto con lecciones de salud e historias bíblicas.
La distribución les dio a los cristianos en la región acceso a comunidades donde antes habían sido mal recibidos, y cerca de 350 personas aceptaron a Cristo — uno de ellos en su lecho de muerte.
Una corriente continua de reportes ilustra la variedad de maneras en las que los bautistas del sur y sus compañeros locales incorporan la proclamación del evangelio y las demostraciones del amor de Dios por las personas que sufren.
Entre los reportes dados durante una reunión de la Alianza Médica Global relacionada con IMB en junio cerca de Richmond, Virginia:
[2]— En África del Oeste, cuando la epidemia del ébola explotó, los obreros de la Junta de Misiones Internacionales se enfocaron en crear conciencia y enseñar técnicas de prevención en Liberia, Togo y Mali. Un estimado de 424.000 personas fueron alcanzadas a través de una combinación de volantes, anuncios de televisión, oradores, estaciones de lavado de manos, conciertos musicales y distribución de alimentos. Miles oyeron las buenas nuevas y más de 200 profesaron fe en Cristo.
— En Asia del Este, las estrategias del cuidado de la salud ayudaron a los creyentes locales a transmitir un alcance de palabra y hecho en pueblos remotos donde el evangelio era desconocido. Al mismo tiempo, clínicas de salud en más de una docena de fábricas urbanas crearon oportunidades para que los voluntarios occidentales del cuidado de la salud se asociaran con sus colegas asiáticos. Más de 1.000 personas hicieron la decisión de seguir a Jesús — varios entre etnias no alcanzadas.
— En Europa, misioneros utilizaron programas de ejercicios físicos, ministerios de recuperación de adicciones, seminarios de salud y servicios médicos prácticos en comunidades plagadas de alcoholismo, obesidad, adicción al fumado, suicidio y enfermedad mental. Un estimado de 4.200 personas escucharon el evangelio, y 790 decidieron confiar en Jesús — incluyendo miembros de una etnia no alcanzada.
La fe cristiana auténtica ayuda a la gente que sufre tanto en el cuerpo como en el alma, dijo Terry Lassiter, líder estratega de IMB para alcanzar a los pueblos de Centro y Sud América.
Jesús y sus discípulos siguieron una estrategia de “predicar y sanar” que combinaba presentar la verdad y llenar las necesidades físicas, les dijo Lassiter a los misioneros que trabajan en roles de cuidado de la salud durante su reunión del 1º al 5 de junio.
Cerca de dos tercios de los encuentros con Jesús y los apóstoles registrados en el Nuevo Testamento involucraban tanto la proclamación como la demostración, dijo Lassiter.
Los seguidores de Jesús deben resistir la tentación de favorecer la predicación sobre la sanidad — o viceversa, añadió Lassiter. Él parafraseó las palabras del fallecido misionero y teólogo E. Stanley Jones: “El evangelio social es como un cuerpo sin alma — es un cadáver. La proclamación sin interés por la dimensión social es como un alma sin cuerpo — es un fantasma.”
Lassiter también citó a un maestro anónimo citado por un bloguero de internet, Daniel Davis: “No somos ni ateos ni agnósticos. Los agnósticos rechazan el cuerpo y abarcan el alma; los ateos rechazan el alma y abarcan el cuerpo. Somos cristianos, y abarcamos ambos.”
El presidente de IMB David Platt, quien le habló a la concurrencia acerca de las metas predominantes de IMB, frecuentemente ha subrayado el enlace entre palabra y acción en las misiones y escribió en su libro “Contracultura”: “Es mucho más fácil darle un vaso de agua al sediento y alejarse que darle el mismo vaso de agua y quedarse para compartir acerca del agua viva que solo viene a través de Cristo. Pero…como cristianos no tenemos la elección de desconectar estas dos. Debemos proclamar el evangelio mientras proveemos cosas buenas a otros. Somos compelidos a hablar mientras servimos. Testificamos con nuestros labios lo que testificamos con nuestra vida.”
Durante la reunión de cada año de la Alianza Médica Global, los misioneros de IMB discuten nuevos acercamientos y estrategias para resaltar la obra entre las etnias donde las buenas nuevas del amor de Dios no son conocidas.
Para aprender más sobre este grupo, envíe un correo electrónico a [email protected]. [3].