MISSOURI CITY, Texas (BP)–¿Por qué hacer viajes misioneros?
Cuando tenía entre 10 y 13 años, estuve en el campo misionero como hijo de misioneros de la Junta de Misiones Internacionales. Después de que mi papá murió y yo había crecido, mi madre regresó al extranjero como misionera de la JMI.
Al haber adquirido de primera mano experiencia en el campo misionero, aprendí a apreciar otros pueblos y culturas. Aprendí que Dios ama y busca al perdido. Aprendí que Dios hace grandes cosas a pesar de las imperfecciones de sus mensajeros. Más que todo, aprendí el valor del amor, la humildad, el sacrificio y el compromiso evidenciado en las vidas de los misioneros.
Es por eso que mi iglesia: Colony Baptist Church en Missouri City, Texas, hizo el compromiso de “adoptar” Mankanya en Senegal.
La gente pregunta: “¿Por cuánto tiempo es su compromiso?” Nuestra respuesta es: “Hasta que nuestra comunidad adoptada comience iglesias bíblicas y envíe misioneros.”
¿Por qué hacer viajes misioneros? Porque no hay suficientes misioneros de tiempo completo para trabajar con cada comunidad, así que nosotros — las iglesias — necesitamos llenar esa brecha.
LLENANDO LA BRECHA
La gente podría preguntar: “¿No hay suficientes necesidades en nuestra propia comunidad?”
La Gran Comisión nos manda ir y hacer discípulos de todas las naciones. Nuestra localidad es muy importante, y tenemos la responsabilidad de compartir a Cristo y ministrar donde vivimos, pero esa no es razón suficiente para ignorar o desatender la necesidad espiritual del mundo.
Otra pregunta es: “¿Por qué asociarse con otros cuando podríamos ir solos?”
Hemos descubierto que cuando hemos sido obedientes al seguir la dirección de Dios, él nos ha colocado con otros que también están obedientemente siguiendo su dirección. Eso es lo que se llama estar dispuesto para el Reino. Nuestro rol es solamente una pieza del rompecabezas. No asociarse con otros significa perder toda la imagen de lo que Dios está haciendo. Usted pierde el verdadero compañerismo de “koinonia” de los creyentes que trabajan juntos. Pierde oportunidades de aprender, crecer y compartir lo que Dios está haciendo.
En la jornada de nuestra pequeña iglesia de adoptar una comunidad de África del Oeste, un misionero de la JMI nos concientizó de la necesidad, un misionero de la JMI nos dio el entrenamiento inicial, un misionero de corto tiempo de la JMI nos llevó en el primer viaje para localizar la comunidad y la JMI fundó la iglesia — Bethel Baptist Church en York, Carolina del Sur — que Dios estaba llamando a la misma comunidad y ayudó a que nos vinculáramos.
Los creyentes de Senegal son nuestros traductores. Wycliffe Bible Translators y SIL International nos proveen material en el idioma materno de nuestra comunidad adoptada. Ellos nos guían a contactos clave quienes son recursos maravillosos que nos ayudan a entender el lenguaje y la cultura de este grupo de personas.
Creo que inicialmente podría ser difícil asociarse porque requiere humildad y paciencia. Requiere tanto dar como recibir. Ser “independiente” algunas veces significa hacer lo que se quiera e ir donde se quiera — pero en el mejor de los casos se aprenderá de la manera difícil, y en el peor, será un desastre.
IGLESIA PEQUEÑA, DIOS GRANDE
“¿Qué hacen las iglesias pequeñas? ¿Qué pasa si usted no tiene una membresía grande o un presupuesto grande?”
Las asociaciones de misiones son para aquellos que escuchan la voz de Dios y tienen la fe de seguirlo. El tamaño de la iglesia no importa.
La nuestra es una iglesia pequeña. Tenemos un Dios grande. Hemos aprendido que donde Dios guía, él provee.
Hace dos años, si usted me hubiera dicho que gastáramos el dinero en ir en una misión con Dios, yo hubiera dicho: “No podemos solventarlo.” Amablemente, Dios no nos dijo la cantidad de dos años, solamente dijo: “Obedece.”
Cuando hace dos años adoptamos el grupo de personas, teníamos un promedio de asistencia a los servicios del domingo de 100. A medida que hemos confiado en Dios, hemos visto que él siempre ha provisto. Hemos recibido recursos para este trabajo que nunca nos hubiéramos imaginado. No hemos carecido de nada en lo que Dios nos ha llamado a hacer.
Nuestra iglesia ha crecido localmente tanto en lo espiritual como numéricamente debido a nuestra fidelidad a Dios. Creo que adoptar una comunidad es el mejor programa de discipulado imaginable.
Nuestros miembros se reúnen a orar, preparar, crear estrategias y aprender el lenguaje. A la fecha, 16 miembros de la iglesia han visitado la comunidad en África del Oeste. También se han reunido con misioneros y han aprendido de primera mano de ellos. Lo que me emociona es el resultado de ver a Dios trabajando en nuestra iglesia y en nuestra comunidad adoptada.
EL ENTUSIASMO ES CONTAGIOSO
Como somos del área de Houston, enfatizamos que la NASA usa astronautas, pero que cada uno en el Centro de Misión es esencial y está implicado. Adoptar esta comunidad es la misión de toda la iglesia.
Los miembros de la iglesia ven a Dios trabajando y están siendo personalmente desafiados en su crecimiento espiritual. Como muchos voluntarios, dicen: “No puedo esperar para regresar.”
Luego añaden: “Necesito hacer esto acá.” Tal vez es por esto que en dos años nuestra pequeña iglesia ha crecido al doble.
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Mark Dean es pastor de Colony Baptist Church de Missouri City, Texas. La Junta de Misiones Internacionales es la entidad de la Convención Bautista del Sur que sirve a las iglesias en la facilitación de su envolvimiento en la Gran Comisión y en el envío de misioneros internacionales para llevar a todos los pueblos a la fe en Jesucristo. La JMI tiene más de 5.500 misioneros apoyados por las ofrendas de los bautistas del sur a través del Programa Cooperativo y de la Ofrenda de Navidad Lottie Moon para las Misiones Internacionales. Para obtener más información, por favor visite
