[1]WASHINGTON (BP) — Los bautistas del sur y otros partidarios de la libertad religiosa elogiaron la declaración de la administración de Obama el jueves (17 de marzo) donde se denominó como genocidio a la campaña asesina del Estado Islámico en contra de los cristianos y de otras minorías.
El anuncio dado por el Secretario de Estado John Kerry proveyó una resolución satisfactoria a lo que los preocupados observadores habían temido por cuatro meses sería una decisión perturbadora por parte de la administración. Los partidarios de la libertad religiosa instaron a Kerry y al Presidente Obama a dar marcha atrás al curso luego de haberse reportado a mediados de noviembre que el Departamento de Estado se preparaba para etiquetar como genocidio solamente la campaña del Estado Islámico en Irak y Siria en contra de la secta yazidí.
En su anuncio del jueves por la mañana, Kerry dijo que según su opinión el Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), también conocido como Daesh, “es responsable por el genocidio en contra de grupos en áreas bajo su control, incluyendo a los yazidíes, los cristianos y los musulmanes chiitas.
El Estado Islámico, dijo, “es genocida por su autoproclamación, su ideología y sus acciones — en lo que dice, en lo que cree y en lo que hace. Daesh también es responsable por crímenes en contra de la humanidad y limpieza étnica dirigida hacia estos mismos grupos y en algunos casos en contra de los musulmanes suni, kurdos y otras minorías.”
[QUOTE@left@180=“Millones, incluyendo a muchos de nuestros hermanos y hermanas, han experimentado las formas más brutales de la persecución.” — Russell Moore]Russell Moore, el líder bautista del sur en el tema de la libertad religiosa –quien peticionó ante la administración tres veces que no excluyera a los cristianos de la designación de genocidio — expresó gratitud “ya que por fin esta administración está dispuesta a reconocer la campaña genocida de ISIS en contra de los cristianos yazidíes y muchas otra minorías étnicas y religiosas.
Moore, presidente de la Comisión de Ética y Libertad Religiosa (ERLC, por sus siglas en inglés), describió la campaña genocida en Irak y Siria como “una urgente crisis de derechos humanos.”
[2]“Millones, incluyendo a muchos de nuestros hermanos y hermanas, han experimentado las formas más brutales de la persecución, y culturas completas están al borde de la extinción en este momento,” dijo en unos comentarios para Baptist Press.
Travis Wussow, director de justicia y libertad religiosa internacionales en la oficina del Medio Oriente de la CELR, dijo a BP que la comisión junto con otras organizaciones “han estado trabajando en este asunto durante varios meses, y estamos agradecidos que la administración de Obama ha respondido a lo que ahora todos concordamos es un genocidio perpetrado por el llamado Estado Islámico.”
“Estamos agradecidos, por supuesto, por lo esto significa para nuestros hermanos y hermanas,” dijo Wussow, “pero tenemos en cuenta también que esta declaración muestra que los Estados Unidos están del lado de todas las víctimas del genocidio, sin importar la etnicidad, la fe o credo.”
Ronnie Floyd, presidente de la Convención Bautista del Sur, también expresó su agradecimiento por la declaración y dijo que espera que “se puedan tomar acciones inmediatas para eliminar esta malvada persecución.” Añadió que la comunidad internacional “necesita mantenerse firme y unida en esta hora por la causa de la dignidad humana y la libertad religiosa para toda la gente globalmente.”
Un tratado de las Naciones Unidas de 1948 define el genocidio como el asesinato y otros actos con la “intención de destruir, todo o en parte, un grupo nacional, étnico, racial o religioso.”
Kerry citó lo siguiente como algunos de los crímenes de ISIS en contra de los grupos minoritarios en esos dos países del Medio Oriente:
–La ejecución de cristianos y la esclavitud sexual de mujeres y niñas cristianas.
–La matanza de cientos de yazidíes y las violaciones y esclavitud sexual de miles de mujeres yazidíes.
–La masacre de cientos de hombres turcomanos chiitas y shabaks, así como el secuestro y violación de mujeres turcomanas chiitas.
Otras atrocidades de ISIS nombradas por los defensores de la libertad religiosas incluyen el asesinato de líderes de las iglesias, tortura, sepulcros masivos, y la destrucción de iglesias, monasterios y cementerios.
ISIS “mata a los cristianos por ser cristianos, a los yazidíes por ser yazidíes, a los chiitas por ser chiitas,” dijo Kerry a los reporteros en el Departamento de Estado. “Toda su cosmovisión está basada en la eliminación de todos aquellos que no se subscriban a su perversa ideología.
“Un elemento del genocidio es el intento de destruir a un grupo étnico o religiosos, en parte o por completo. Sabemos que [ISIS] les ha dado a algunas de sus víctimas la oportunidad de elegir abandonar su fe o ser asesinados, y para muchos, es una decisión entre un tipo de muerte y otro tipo.”
La respuesta de los Estados Unidos ante el Estado Islámico debe ser en parte “destruirlo con la fuerza militar,” pero otros esfuerzos también son importantes, dijo Kerry, citando más de $600 millones en ayuda durante los últimos dos años y medio para los iraquíes desplazados por ISIS.
“Es importante nombrar estos crímenes,” dijo Kerry. “Pero lo que es esencial es detenerlos. Eso requerirá unidad en este país y dentro de los países directamente involucrados.”
Los líderes de la libertad religiosa dijeron que debe continuar el apoyo y la protección de las minorías religiosas amenazadas por o sufriendo a manos del Estado Islámico.
Moore dijo a BP, “Los cristianos evangélicos continuarán defendiendo y trabajando compasivamente por los refugiados y otros, y orando que nuestro país siempre defienda la libertad religiosa y la dignidad humana dondequiera que estén amenazadas.”
Douglas Napier de Allience Defending Freedom (ADF) llamó a la denominación de genocidio dada por Kerry “un importante primer paso en el proceso necesario para que los Estados Unidos, la ONU y la comunidad internacional detengan las matanzas en el Medio Oriente.”
Napier, consejero principal y director ejecutivo de ADF International, dijo en unos comentarios por escrito, que los Estados Unidos y los 146 países que forman parte del tratado sobre el genocidio en la ONU “tienen una obligación de hacer todo lo que puedan para ponerle fin a la matanza de gente inocente.”
El representante Jeff Fortenberry, (republicano-Nebraska), aplaudió la decisión de Kerry y expresó tener esperanzas que “levantará la consciencia internacional, terminará con el escándalo del silencio, y creará las precondiciones para la protección y reintegración de estas antiguas comunidades de fe en sus tierras ancestrales.”
La Cámara de Representantes aprobó unánimemente el 15 de marzo una resolución patrocinada por Fortenberry donde se llamó genocidio a la violencia del Estado Islámico en contra de las minorías religiosas.
Moore estuvo entre los más de 110 líderes que firmaron una carta del 17 de febrero para el Presidente Obama instando a su administración a categorizar como genocidio las acciones de ISIS. Él escribió a Kerry a mediados de noviembre para instarlo a no hacer una distinción entre los diferentes grupos sufriendo a manos de la organización terrorista. A inicios de diciembre, Moore y R. Albert Mohler Jr., presidente de Southern Baptist Theological Seminary, figuraron entre los 30 líderes que firmaron la carta que llamaba a Kerry a prestar atención a la evidencia de que los cristianos son los blancos del genocidio y reunirse con los representantes de su coalición antes de emitir una decisión.
El anuncio de Kerry se dio un día después de la fecha límite para tal reporte, establecida por el Congreso en una propuesta de ley de gastos diversos promulgada a mediados de diciembre.