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SEMANA DE ORACIÓN: El impacto de Dios entre los exiliados

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NOTA DEL EDITOR: La Semana de Oración de este año para las Misiones Internacionales en la Convención Bautista del Sur es del 4 al 11 de diciembre. Cada año, la Ofrenda de Navidad Lottie Moon  para Misiones Internacionales complementa el Programa Cooperativo para apoyar las iniciativas de los misioneros internacionales bautistas del sur para compartir el evangelio. La meta para la ofrenda de este año es de $185 millones de dólares. Para encontrar recursos sobre la ofrenda, vaya a https://www.imb.org/generosity/lottie-moon-christmas-offering/ [2]

Dos hombres abrían sus Biblias sentados en un restaurante de comida rápida, conversando sobre un concepto clave del cristianismo: Jesús resucitando de entre los muertos.

“¿Qué? ¡Claro que no!”, exclamó Alex Pokusaev, un estudiante universitario de Uzbekistán, y tomó una de las Biblias: “¿Jesús voló o algo así?”.

Ben Coulter, pastor de la Iglesia Bautista Emmanuel de Magnolia, Arkansas, evitó reírse, y le explicó en qué consistía la resurrección de Jesús; la emoción en la cara de Alex demostró que lo había entendido. El domingo siguiente, este estudiante internacional de la Universidad de Southern Arkansas decidió seguir a Jesús.

La decisión no se tomó por impulso; él pasó meses haciéndole muchas preguntas a Ben y a los demás miembros de la iglesia. Explicó que, como estudiante internacional y al estar tan lejos de su casa, sentía curiosidad por todo. Todo era nuevo.

Alex también contó que a él no le habían inculcado ninguna creencia: fue bautizado en la iglesia ortodoxa rusa por su padre, mientras que su madre era una musulmana no practicante.

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La mayoría de los miembros de la iglesia Emmanuel nunca había escuchado sobre el país de Uzbekistán. A medida que el estudiante universitario hablaba de su tierra natal, los miembros de la congregación comenzaron a amar a los uzbekos. En aquel lugar, menos del 1 % reconoce a Jesús como su Salvador. Sus corazones se conmovieron cuando Alex preguntó: “¿Qué pasa con los que nunca han oído hablar de Jesús?”.

Esa pregunta impulsó a la iglesia a actuar, y decidieron trabajar con los uzbekos de Arkansas. La Convención Estatal Bautista de Arkansas colabora con la Junta de Misiones Internacionales y la Junta de Misiones Norteamericanas para alcanzar a las etnias de la diáspora dentro de los Estados Unidos. La palabra “diáspora” es el movimiento, la migración, el asentamiento o la dispersión de personas fuera de su tierra natal. La iglesia Emmanuel se comprometió estratégicamente con estos grupos de la diáspora en su comunidad.

Sin embargo, ellos no se conformaron, y enviaron un equipo a Nueva York, donde viven más de 100,000 uzbekos.

Ben explicó: “Dios nos dio un corazón para Uzbekistán; Alex llevaba varios años en Estados Unidos, y nadie se sentó a explicarle el evangelio antes de venir aquí. Nuestra iglesia se dio cuenta de que Dios nos estaba trayendo gente de etnias no alcanzadas… no solo en Arkansas sino en todo Estados Unidos”.

Los misioneros de Arkansas llegaron a Nueva York y, saliendo del metro al adentrarse en las calles de Brighton Beach por primera vez, no escucharon mucho inglés. Los olores de los puestos de comida y los restaurantes no les eran familiares. Estaban de misiones internacionales sin salir de su propio país.

El pastor también indicó: “Lo que empezó como apoyo para un estudiante uzbeko en nuestra casa se convirtió en una carga por toda una nación. ¿Cuántos uzbecos no saben que Jesús resucitó? Debemos hacer algo al respecto”.

Demos gracias a Dios por el deseo de los bautistas del sur de alcanzar a las naciones que migran a los EE. UU., y preguntemos a Dios en oración cómo podemos responder a la necesidad de alcanzar con el evangelio a los exiliados que habitan en nuestras comunidades. Oremos por Alex y su crecimiento espiritual para que muchos más puedan conocer la verdad sobre Jesús.