MEXICO CITY (BP) – Diez sacerdotes católicos y un seminarista fueron asesinados durante el sexenio del expresidente mexicano López Obrador que concluyó el 30 de septiembre, informó el Centro Católico Multimedial en su informe anual 2024.
Siete obispos y otros siete sacerdotes fueron agredidos violentamente durante el mismo periodo, pero sobrevivieron, según el centro, que relata ataques simultáneos a iglesias y lugares sagrados que marcan “una escalada de agresiones que demuestran la progresiva desacralización y la ausencia de todo respeto hacia lo santo y sagrado”.
Un sacerdote ha sido asesinado desde que la presidenta Claudia Sheinbaum inició su mandato en octubre: Marcelo Pérez Pérez, de la diócesis de San Cristóbal de las Casas.
“Su asesinato no fue circunstancial, ni tampoco un ‘daño colateral’”, señalaba el informe, “y, de forma artera, demostró que sus acciones pastorales y su actividad en favor de los derechos humanos eran inconvenientes para quienes truncaron su existencia”.
Aunque no se discute la persecución de los católicos en México, los autores del informe, Guillermo Gazanini Espinoza, jefe de información del Centro Multimedial, y el director del Centro Multimedial, Sergio Omar Sotelo Aguilar, describen la persecución como especial sólo a los católicos.
“Los sacerdotes católicos en México siguen siendo tratados como ciudadanos de segunda, mientras que otros ministros de culto, ya sea de grupos religiosos o de movimientos ideológicos, gozan de libertad, sin sanción alguna, para expresar sus opiniones cívicas”, escribieron ambos en el prólogo del informe. “Esto es una afrenta a la libertad de conciencia y a los derechos de participación democrática que permite nuestra Constitución”.
Los informes de los defensores internacionales de la libertad religiosa coinciden en que México es peligroso para los sacerdotes católicos, pero también citan la persecución de otros, incluidos los grupos indígenas y cualquier líder religioso que abogue por la moralidad.
La Comisión de EE.UU. sobre Libertad Religiosa Internacional, en su informe 2023 sobre Libertad Religiosa para las Comunidades Indígenas en América Latina, señaló la persecución de las comunidades indígenas en México. Actualmente, unos 150 bautistas se encuentran desplazados de sus pueblos indígenas en Hidalgo, México, después de que los líderes de la zona, de mayoría católica, incumplieran un acuerdo que les habría permitido regresar a sus hogares. Los pastores bautistas y otras personas han sufrido graves palizas.
El Departamento de Estado de Estados Unidos, en su Informe 2023 sobre Libertad Religiosa Internacional, citó la estadística del Centro Multimedial de un informe anterior que contabilizaba 800 incidentes de extorsión y amenazas contra sacerdotes en México entre octubre de 2022 y octubre de 2023.
El Departamento de Estado también informó de que “los incidentes de violencia contra líderes religiosos no parecían estar basados únicamente en la identidad religiosa”, en referencia al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación en México. “Algunas ONG dijeron que los cárteles y otros grupos delictivos seguían señalando a sacerdotes católicos y otros líderes religiosos por su condena de las actividades delictivas y porque las comunidades los consideraban figuras de autoridad moral”.
Aún así, el informe del Centro Católico Multimedial muestra una persecución generalizada de los católicos en México, documentando casi 900 casos de ministros católico romanos y trabajadores eclesiásticos extorsionados o amenazados, y 26 ataques a edificios religiosos durante la presidencia de López Obrador.
El grupo de vigilancia de la persecución cristiana CSW, al anunciar el informe, pidió al gobierno mexicano que protegiera a los sacerdotes católicos y a otros líderes religiosos de cualquier daño.
El Centro Católico Multimedial “lleva casi 35 años documentando esta tendencia, y es motivo de profunda preocupación que los ataques contra sacerdotes y líderes religiosos se hayan disparado y se hayan mantenido a un nivel elevado durante las tres últimas administraciones presidenciales, sin que haya indicios reales de mejora”, declaró Anna Lee Stangl, Directora de Incidencia Política del CSW.
“Nos solidarizamos con (el centro) en el llamamiento a la comunidad internacional, en colaboración con el gobierno mexicano”, dijo, “para abordar eficazmente los diversos factores, incluyendo la impunidad, la corrupción y la proliferación de grupos criminales organizados violentos involucrados en el tráfico internacional de seres humanos, armas y drogas, que han hecho de México uno de los países más peligrosos del mundo para trabajar como sacerdote católico”.
El informe, en español, está enlazado aquí.