fbpx
Articulos en Español

Augusto Valverde, líder hispano durante largo tiempo, muere a los 71 años


MIAMI (BP) — El pastor de Miami Augusto Valverde, líder durante largo tiempo en la Confraternidad Hispana Bautista Nacional de las iglesias bautistas del sur, murió el miércoles 17 de julio. Tenía 71 años.

Valverde, el actual presidente de la confraternidad, había servido en el cargo nueve veces desde inicios de los 2000s y también sirvió como su director ejecutivo.

Fue uno de los miembros fundadores del nuevo Consejo de Líderes Hispanos Bautistas del Sur, que tuvo su primera reunión nacional con anterioridad a la reunión anual de la SBC de junio en Birmingham, Ala.

Recientemente celebró sus cinco décadas como ministro bautista ordenado, tuvo problemas de salud en meses recientes y murió en el Centro Médico Mount Sinai en Miami.

Valverde era el pastor sénior de la Iglesia Bautista Un Nuevo Amanecer, la cual fundó hace nueve años en la Asociación Bautista de Miami.

Previamente fue pastor de la Iglesia Bautista Resurrección en Miami durante 24 años, y guio la iglesia a plantar 15 iglesias en Florida, en su país de origen Argentina y en Nicaragua y Honduras.

Valverde estuvo activo en todos los niveles de la vida bautista del sur — en la Asociación Bautista de Miami, incluyendo el servicio como moderador y muchos otros puestos, y en los ministerios de la Convención Bautista de Florida, donde sirvió en varios comités de la convención.

Además de en la Confraternidad Hispana Nacional, también estuvo activo en las confraternidades hispanas estatales y locales.

Valverde raramente se perdió alguna de las reuniones anuales de la Convención Bautista del Sur y se relacionó bien con los líderes de la SBC y pastores compañeros.

Oriundo de San Juan, Argentina, cuyos padres y abuelos eran cristianos comprometidos, hizo profesión de fe y fue bautizado en la Primera Iglesia Bautista de San Juan en septiembre de 1963. Él y su esposa Eunice se casaron en 1970 y poco después, él fue ordenado pastor. Sirvió en varias iglesias en Argentina antes de llegar a Estados Unidos a pastorear en 1986.

En Argentina, Valverde sirvió como parte del equipo de liderazgo de la organización evangelizadora Luis Palau durante muchos años. En EE.UU., estuvo involucrado en el movimiento de reavivación Hay Vida en Jesús.

Bobby Sena, asesor de relaciones hispanas del Comité Ejecutivo de la SBC, dijo que Valverde era “un ministro extraordinario — un hermano y amigo de cada miembro de su congregación … fueran jóvenes o viejos.”

“Su casa era refugio para muchos,” dijo Sena. “Cuando hacía amigos, y tenía muchos, no escatimaba esfuerzos para ser útil a los demás en una relación empática y amorosa; no había ningún asomo de hipocresía en él.

“Era un hombre activo, pero humilde — sin ambiciones de puestos ni privilegios,” continuó Sena. “Era apasionado por el trabajo, y siempre estaba generando nuevos proyectos. Su visión siempre fue que el centro del propósito del Reino está en la iglesia, no en las estructuras. Cuando cometía un error, era capaz de reconocerlo y pedir perdón … Ciertamente, decía lo que pensaba … porque no creía mucho en los patrones culturales, sino en la expresión de ideas y sentimientos.”

Julio Fuentes, pastor de la Iglesia Bautista Nueva Vida en West Park, Fla., y colega de Valverde en la confraternidad hispana, dijo que uno de los miembros de la iglesia de Valverde una vez comentó: “Cuando conoces a Valverde, es imposible no creer en Dios.”

Valverde mantuvo una “vida espiritual sólida todos los años de su vida. La lectura de la Palabra y la oración devota y ferviente a la cual le dedicaba largos períodos del día — eran su gran pasión. Con sus amigos, cuando estábamos juntos, nos mantenía hasta el amanecer para orar y leer la Palabra.

“No recuerdo conocer una congregación que ame más a su pastor,” dijo Fuentes. “Como su Maestro, siempre estaba dispuesto a dar su vida por sus ovejas. ¿Quién que estuviera sufriendo no tenía al pastor Valverde sufriendo con él o ella? ¿Quién que estuviera experimentando gozo no tenía al pastor Valverde uniéndosele en la celebración de ese gozo?”

Valverde llevó su involucramiento en las cruzadas evangelizadoras en Argentina a EE.UU., dijo Fuentes, “y las promovió hasta los últimos días de su vida. Comenzó con su propia iglesia organizando cruzadas, la primera tuvo 1,500 profesiones de fe. Él ha de haber participado en años recientes en más de 30 eventos de este tipo.”

Fuentes dijo que las cruzadas “contenían los elementos que lo motivaron: oración por el inconverso y evangelismo relacional mucho antes de la cruzada, donde los misioneros voluntarios llegaban de otros estados y países para bendecir a las iglesias con su trabajo; la efectividad del método ha sido probado. Treinta misioneros pueden alcanzar de 300 a 400 personas para Cristo en una semana.” Valverde también ayudó a organizar el alcance hispano para numerosos esfuerzos evangelizadores Crossover con anterioridad a la reunión anual de la SBC cada año.

Elías Bracamonte, también expresidente de la Confraternidad Bautista Hispana, dijo: “Fue un honor hacer el trabajo del Reino de Dios junto al pastor Augusto Valverde. Sus amables palabras de ánimo fueron siempre estimulantes. Como consejero, recuerdo que él decía: ‘Permítanme sugerir lo siguiente. …’ Su pasión por el pueblo hispano fue dual: su llamado a la unidad de la iglesia para hacer la obra del Reino de Dios y alcanzar a la presente generación con el Evangelio.”

Valverde, en una historia de Baptist Press 2018, describió la unidad como “siempre importante y vital para lograr grandes cosas. Creo que somos más fuertes cuando estamos unidos, ese es el corazón de Jesús.”

Cuantas veces la crítica y la división ocurran entre los líderes hispanos, “necesitamos humillarnos y pedirnos perdón y aprender a amarnos y a respetarnos los unos a los otros para alcanzar esta intrínseca unidad que tanto necesitamos como pueblo de Dios,” dijo Valverde.

“Debemos no ver las victorias de nuestros socios como rivalidad. Unámonos en su gozo. Su triunfo debe ser nuestro triunfo y su derrota debe ser la nuestra también.”

Emanuel Roque, yerno de Valverde y catalizador de la iglesia hispana de la convención de Florida, dijo que la familia está agradecida “por las oraciones, pensamientos y apoyo de tantos hermanos, amigos y familiares que han orado y nos han bendecido en estos días … La esperanza de Cristo para la vida eterna es hecha realidad para todo el que cree.”

Además de su esposa, a Valverde lo sobreviven su hija Roxanna Roque; su hijo Esteban y su nuera Mercy; y cuatro nietos.

Un servicio de celebración de vida fue realizado el viernes 19 de julio, en el Florida Baptist Southeast Regional Center/First Baptist Church, Hialeah, seguido de un servicio funeral el sábado 20 de julio, en Caballero Rivero Woodlawn Park South en Miami.

    About the Author

  • Por David Raúl Lema Jr. y Art Toalston

    David Raúl Lema Jr. es profesor de misiones y coordinador regional del sur del Seminario Teológico Bautista de Florida. Art Toalston es editor sénior de Baptist Press.

    Read All by Por David Raúl Lema Jr. y Art Toalston ›