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Egipcio convertido es regularmente maltratado, dice abogado


ESTAMBUL, Turquía (BP) — Autoridades en Egipto regularmente golpean y arrastran por el piso de concreto de la prisión al notable convertido Bishoy Armia Boulous, anteriormente conocido como Mohammed Hegazy, dijo su abogado.

Encarcelado por las autoridades egipcias bajo acusaciones falsas de fotografiar ataques musulmanes a cristianos, y luego mantenido ilegalmente después de que cumplió su sentencia, Boulous es golpeado varias veces a la semana, dijo el abogado Karam Ghobriel. 
Los oficiales de la prisión también le han rasurado a la fuerza la cabeza a Boulous, un castigo y técnica de hostigamiento normalmente reservado para delincuentes violentos, dijo. 
El abuso físico ha continuado además de la detención ilegal de Boulous, dijo Ghobriel. Boulous permanece en la prisión Tora a pesar de haber cumplido la sentencia de un año que debió haber terminado en diciembre por el cargo de esparcir información falsa con la intención de “causar daño o perjuicio al interés público” de Egipto, dijo. 
Ghobriel dijo que piensa que las golpizas fueron ordenadas fuera de la prisión e intentan hacer una cosa — quebrantar el espíritu de Boulous. 
“Lo golpean para humillarlo, esperando que cambie de parecer, esperando que regrese al camino de antes en vez de insistir en el cristianismo,” dijo. 
En respuesta a las golpizas y a un sinnúmero de otras irregularidades legales, Ghobriel presentó una querella formal a principios de mes, ante Hasham Barakat, fiscal general de Egipto. El abogado identificó al agresor principal de Boulous por nombre y le pidió a Barakat proteger los “derechos y libertades” de Hegazy. 
“El acusado terminó su sentencia por ley el 2 de diciembre de 2014, y es mantenido ilegalmente en prisión,” lee la querella. “Además de eso, él es continuamente golpeado y arrastrado [por el piso de la prisión] en la prisión Tora por el oficial Ahmed Fauzy.” 
Ghobriel, quien visitó a Boulous en prisión dos veces la semana pasada, dijo que los guardas lo habían golpeado recientemente. El abogado dijo que considera que el trato es espantoso. 
“De acuerdo a la ley y a la constitución, cualquier acusado debe ser tratado de manera respetuosa como humano, debido a que la ley no dice a los trabajadores de la prisión que ‘los golpeen, los arrastren o los torturen,'” dijo. 
Las autoridades egipcias arrestaron a Boulous el 2 de diciembre de 2013, en una cafetería en Minya, cerca de 250 kilómetros al sur del Cairo, y lo acusaron de trabajar para The Way TV, un canal propiedad de cristianos cópticos con sede en EE.UU. que transmite en Egipto vía satélite. El gobierno adujo que Boulous estaba contribuyendo a “la imagen falsa” de que había violencia en contra de los cristianos en Egipto. 
El arresto tuvo lugar durante una de las peores olas de ataques en contra de los cristianos en la historia del país. El desenfreno de la violencia, documentada a la larga por numerosos periodistas, incluía el secuestro público, asaltos, destrucción de propiedad y ataques a varios edificios de iglesias que las turbas de militantes musulmanes quemaron completamente. Mucha de la violencia tuvo lugar en la provincia de Minya. 
Desde el principio, los activistas de derechos humanos dijeron que los cargos en contra de Boulous no tenían mérito. En otra querella oficial, presentada en la oficina de Barakat el 18 de marzo, 18 diferentes grupos de derechos humanos de Egipto y de todo el mundo declararon que los cargos estaban “claramente relacionados con su conversión religiosa.” 
“La detención, el trato y la persecución del señor Boulous abiertamente violan la reciente establecida constitución de Egipto, la cual claramente establece que ‘la libertad de creencia es absoluta,'” lee su querella. “Su caso es también una violación a los acuerdo internacionales de los cuales Egipto ha sido parte durante décadas.” 
Documentos internos del Ministerio del Interior (MOI por sus siglas en inglés) obtenidos por Morning Star News muestran que durante el tiempo de su arresto, el MOI empleó por lo menos a un informante para seguir a Boulous, quien fue identificado como un convertido. Los mismos documentos mostraron que cuando los oficiales arrestaron a Boulous, también arrestaron a tres mujeres periodistas. Todas ellas, al igual que Boulous, estaban documentando “ataques sectarios.” 
A diferencia de Boulous, sin embargo, las reporteras fueron interrogadas y luego liberadas.

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  • Por el Personal/Morning Star News