NASHVILLE (BP) — En mi primera Pascua como creyente a los 14 años, nuestro grupo de jóvenes se reunió para tener un servicio al amanecer en el cementerio que tenía una enorme cruz en una colina.
Mientras caminaba hacia la cruz en la oscuridad, me sentí como uno de los primeros discípulos después de haber escuchado rumores de la resurrección de Jesús. Anhelaba ansiosa que el sol saliera en mi primera Pascua como cristiana.
Pero no todas las Pascuas son así. Y para los adolescentes que han crecido en la iglesia puede que sea necesario algo novedoso para reconectarlos con el asombro de lo que significa la Pascua para los creyentes. Aquí expongo algunas ideas para probar en su familia:
— Añada un elemento del “Seder” en su cena. Las familias judías comen una cena “Seder” las primeras dos noches de la Pascua. Seder significa orden, y se comen alimentos simbólicos en un orden específico durante toda la cena. Uno de esos alimentos es el pan de matzo, un pan estilo galleta salada que se puede comprar en casi todos los supermercados.
Al inicio de la cena, se envuelve en una servilleta un trozo de matzo que representa al Cordero de la Pascua cortado a la mitad. Éste se esconde en la casa para que los niños lo encuentren al final de la comida. Una vez que lo encuentran, todos comen un pequeño trozo. Para los cristianos, el simbolismo encaja perfectamente con Jesús, nuestro Cordero Pascual, y las palabras de Jesús en su Última Pascua con sus discípulos, pueden ser una adición maravillosamente significativa en la cena de Pascua.
— Compare y contraste los cuatro relatos en los Evangelios: Durante los días o semanas anteriores a la Pascua, lea la historia del arresto, crucifixión y resurrección de Jesús en cada uno de los cuatro Evangelios. Pida a su familia que busque detalles que sean específicos a cada relato, tal como la adición de la huida de un jovencito en el relato de Marcos.
— Cree un recuerdo familiar: Un año en la Pascua, nuestra familia hizo una presentación de fotografías actuando los eventos de la mañana de la Pascua. Usamos disfraces simples (batas para baño y toallas) y recreamos las escenas de la historia. Pusimos esas fotografías en la computadora y las conectamos usando una canción de Pascua de Don Francisco llamada “¡Él vive!” (está disponible en el internet). Le mostramos nuestra presentación a la clase de Escuela Dominical y a nuestra familia en la cena de Pascua. Nuestro video fue muy sencillo, pero puede llegar a ser tan elaborado como usted quiera. Puede llegar a ser el momento culminante de cada Pascua por muchos años.
— Ore por un país específico para que haya un reavivamiento en la Pascua: Consiga una copia del libro Operation World de Jason Mandrick (disponible en LifeWay.com). Este libro le guía en oración por un país diferente cada día, así que en un año usted habrá orado por cada nación del planeta. Elija a un país o dos por los cuales su familia quisiera orar. Busque en el libro las cosas específicas por las que puede interceder delante de Dios y por los cristianos en ese país, ore por un reavivamiento.
Y en cualquier cosa que haga en la Pascua, pídale a Dios que le ayude a honrar a Su Hijo, y celebrar como familia.
¡Él resucitó! ¡Vamos a celebrar!
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Beth Swale es una escritora que vive en Bourbonnais, Ill. Este articulo apareció por primera vez en Living with Teenagers, una publicacion de LifeWay Christian Resources.
