RUSTON, La. (BP) — Los daños provocados por las recientes lluvias torrenciales en la Costa del Golfo cubrieron partes de Louisiana, Texas y Mississippi y dejaron la región no solamente inundada, sino también a la espera de posibles años para la recuperación.
Las aguas pluviales han dañado un estimado de 5.000 casas en Louisiana solamente en cerca de 28 feligresías, pero ese número posiblemente se elevará. A medida que las aguas retroceden en una ciudad y la recuperación empieza, probablemente se elevan en otra. Algunos de los grandes ríos del estado todavía están por subir al máximo.
“Esta inundación no respetó a nada ni a nadie,” dijo David Abernathy, el comandante del incidente de alivio en desastre de la Convención Bautista de Louisiana. “Esto golpeó a todos. Los ríos y los lagos están subiendo a records nunca antes vistos.”
Para el martes (15 de marzo), Abernathy dijo que el desafío estaba creciendo rápidamente cuando más reportes llegaban al equipo de comando del incidente.
“El radio de acción del desastre está creciendo,” dijo. “Necesitamos toda la ayuda que podamos obtener. Estamos encontrando devastación en todas partes. Es difícil abarcar lo extendido que está.”
Las iglesias rurales han sido ministradas en comunidades aisladas, pero ahora la fatiga está empezando.
El estimado de precipitación varía, pero Abernathy reporta que algunas comunidades de Louisiana recibieron un exceso de 61 centímetros. El efecto ha sido similar al de un huracán pero sin el viento, dijo. Algunos funcionarios han llamado esta inundación la más amplia inundación no huracanada en la historia del estado.
La inundación en Texas, Louisiana y Mississippi es uno de los varios eventos recientes de inundación, incluyendo incidentes en Missouri y South Carolina.
“Ha sido un largo invierno de inundaciones,” dijo Mickey Caison, director ejecutivo bautista del sur de alivio en desastre para la Junta de Misiones Norteamericanas (NAMB por sus siglas en inglés). “Los bautistas del sur serán capaces de redoblar.”
El sistema de clima que llevó la actual inundación a Texas, Louisiana, Mississippi, también afectó Arkansas, Tennessee y Alabama. La tormenta precede las lluvias normales de la primavera, las cuales todavía no han comenzado.
La prolongada naturaleza del esparcido evento de inundación deja a los líderes de alivio en desastre a la espera de cambios mientras aguardan las valoraciones. Muchos estados ya han activado a voluntarios para ayudar, mayormente en Louisiana. Los líderes han movilizado unidades de alimentación, de remoción de lodo, duchas y lavanderías que están actualmente operando. Muchas están sirviendo en pequeñas comunidades para permitirle a la gente allí que laven la ropa, dijo Abernathy.
El presidente Barak Obama divulgó una declaración de desastre para Louisiana el domingo (13 de marzo), la cual significaría que más recursos estarían disponibles para las víctimas y los socorristas. Por lo menos han ocurrido tres muertes relacionadas con la inundación en Louisiana.
NAMB, que coordina las respuestas bautistas del sur a los desastres en los varios estados, envió un cargamento de provisiones el lunes (14 de marzo) a Ruston, Louisiana. Los voluntarios allá recibirán baldes con provisiones, agua, equipo de protección personal, cobijas y otros artículos esenciales.
En el este de Texas, Terry Henderson, director de Alivio en Desastres de los Hombres Bautistas de Texas dijo que la inundación se extendió desde Texarkana a lo largo de la frontera de Louisiana hasta Orange, donde él esperaba que se estableciera un equipo de comando de incidente. No espera que el agua suba a su máximo en Orange hasta el jueves (17 de marzo). La remoción de lodo para el restablecimiento de las casas ha iniciado en Kilgore.
Scottie Stice, director de alivio en desastre de los Bautistas del Sur de la Convención de Texas (SBTC por sus siglas en inglés), dijo que sus planes seguían en cambio el martes en la mañana cuando el estado cerraría la I-10.
“Tenemos tres unidades de duchas en el campo que apoyan los albergues de las iglesias,” dijo Stice en relación a algunas de las actividades actuales. “Tenemos una unidad de alimentación en la Iglesia Bautista First, Vidor, y equipos de motosierras en Malakoff.”
Todos los equipos de remoción de lodo de SBTC están en alerta en espera de la recesión de las aguas, dijo Stice.
En Mississippi, la mayor parte del daño de la inundación ocurrió alrededor de Clarksdale donde Don Gann, el director de alivio en desastre de la Convención Bautista de Mississippi, estimó que cerca de 100 casas experimentaron cierto grado de daño por la inundación.
La valoración ha empezado lo mismo que el ministerio por parte de los capellanes de alivio en desastre de los bautistas de Mississippi. Gann pasó mucho de la reunión del lunes con los directores de asociaciones de misiones y pastores del área.
Mientras tanto, el líder veterano de alivio en desastre espera más inundación en el sur de Mississippi a medida que las aguas avanzan desde el norte de Louisiana.
“Las puedes ver venir,” dijo Gann de las inundaciones. “Pero no hay mucho que se pueda hacer al respecto.”
Aquellos que deseen donar a Alivio en Desastre de los Bautistas del Sur (SBDR por sus siglas en inglés) pueden contactar a la convención bautista en su estado o visitar https://donations.namb.net/dr-donations . Para hacer donaciones por teléfono, llamen al 1-866-407-NAMB (6262) o envíen cheques a NAMB, P.O. Box 116543, Atlanta, GA 30368-6543. Designen los cheques para “Disaster Relief.”
NAMB coordina y administra las respuestas de los bautistas del sur a desastres mayores a través del compañerismo con 42 convenciones estatales bautistas, la mayoría de las cuales tienen sus propios ministerios estatales de alivio en desastre.
Los bautistas del sur tienen 65.000 voluntarios entrenados – incluyendo capellanes — y 1.550 unidades móviles de alimentación, motosierras, limpieza de lodo, comando, comunicación, guardería infantil, duchas, lavandería, purificación de agua, reparación y generadores de electricidad. SBDR es uno de los tres más grandes movilizadores de voluntarios entrenados para ayuda en desastre en Estados Unidos, junto con la Cruz Roja Estadounidense y el Ejército de Salvación.