fbpx
Articulos en Español

Reenfocados en el Supremo Llamamiento de Jesucristo

Emanuel Roque


En un mundo de tanta información, voces, e influencias hay que escoger cuidadosamente en que enfocamos nuestra mente, corazón, y vida. Es importante nunca olvidar la Palabra de Dios, lecciones de fe, y Su voluntad. Pero hay cosas de este mundo caído que quieren desenfocarnos y desviarnos para apartarnos de esa dirección divina. Tenemos que decidir olvidar lo que no conviene y enfocar en lo que Dios quiere guiarnos en Su voluntad Bíblica.

“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”. (Fil. 3:13-14)

Estando en una cárcel a causa de vivir para Jesucristo, el apóstol Pablo estaba pasando momentos críticos para su propia vida de fe, la obra que todavía estaba por cumplirse, y ejemplo a las iglesias. El decidió sus compromisos desde esa relación personal que tenia con Jesucristo en plena confianza que Dios seguiría obrando en su futuro.  Dios siempre es fiel para cumplir Sus propósitos en nuestras vidas, cuando decidimos seguirle a pesar de las circunstancias. ¿Estás dispuesto a confiar en El?

El reconocimiento de lo que todavía faltaba en su propia vida, como en las iglesias, no era motivo para que se desanimara o diera por vencido. Aun las cosas que el enemigo espiritual estaba tramando serian parte de lo que serviría para llevarlo a depender más en la gracia de Jesucristo en todo aspecto de su vida y la obra del Señor. La gracia de Dios seria suficiente en cada reto y Su poder se perfeccionaría en esa aparente debilidad. Era parte necesaria de la formación de ese carácter Cristiano y labor continua para el Señor. Podía contar con los recursos divinos al proclamar, “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. (Fil. 4:13) Lo que se requería era un continuo compromiso a su Señor y Palabra eterna a pesar de todo lo que estaba ocurriéndole.

Él podía optar por regresar a su vanagloria de tiempos pasados o valores equivocados. También podía enfocar en su bienestar o derechos personales. La trampa de querer controlar el futuro por preocuparse mucho tampoco sería la respuesta. Pero decidió mostrar que había un propósito mayor y transcendental que Cristo tenía en el evangelio. Toda la gloria tenia que ser para Jesucristo y la atención debiera enfocarse absolutamente en El.

Cuando lo que está ocurriendo en este mundo quiere inquietarte, estorbarte, o sacarte de tu lugar de confianza en fe, rápidamente reenfoca con todas tus fuerzas en Jesucristo y Su Misión eterna a la cual nos ha llamado.

El enemigo quiere desgastar nuestras energías y mente en otros asuntos que no nos ayudan a enfocar en cultivar nuestra relación con Cristo y conocerle más cada vez. No es solo información sino relación, dependencia, y transformación por medio de Su Palabra. Todo esto no es solo para nuestra comodidad o bienestar, sino para que nos sometamos a la voluntad de Dios obedeciendo lo que Él quiere para nuestras vidas.

Tenemos la opción de reenfocarnos diaria y continuamente a lo que Su Palabra nos da como guía y prioridad. Muchas cosas puedan cambiar e inundar nuestro mundo de información, atención, y demandas.

Solo una cosa prioritaria durará eternamente y nunca será quitada. Ese amor y devoción a Cristo y Su Palabra expresado en lo que cautiva Su corazón para nosotros y Su iglesia siempre debe ser lo principal. Cuando no es así se llenará el corazón y mente de substitutos que se convertirán en ídolos del alma.

Eventualmente van tomando control y se establecen para desviarnos de las cosas mejores que El tiene para nuestras vidas y Su pueblo. Siempre es bueno hacer un autoanálisis con Su Palabra en la mano alumbrando los recesos de nuestra mente y corazón para que El nos hable lo que desee.

Pablo decidió seguir ese compromiso y experiencia con Cristo no permitiendo desviarse con el torbellino de cosas que querían apartarlo o detenerlo de la voluntad de Dios para Su vida. La meta de ser más como Cristo y ser fiel hasta el final lo llevaba a seguir escuchando la voz de Su Salvador y Señor a través de esa Palabra Bíblica.

Dios sigue llamándonos de igual manera y tenemos la oportunidad y privilegio por Su gracia de seguirle siempre. No dejemos que nada ni nadie nos inquiete o desvíe de ese supremo llamamiento en Cristo Jesus.

Al unirnos de igual manera como Su iglesia en mantener ese primer amor, dedicación, y compromiso a Su Palabra y Misión, Dios será fiel en guiarnos en toda etapa y circunstancia a cumplir ese Supremo Llamamiento de igual manera.


Emanuel Roque is the Hispanic Church Catalyst of the Florida Baptist Convention.

    About the Author

  • Por Emanuel Roque