HOUSTON, Texas (BP) — Un año después, el director ejecutivo de Bautistas del Sur de la Convención de Texas (SBTC), Jim Richards, y otros líderes de la SBTC planean conmemorar el aniversario del huracán Harvey con reuniones de oración y compañerismo programadas para el 25 al 27 de agosto.
El huracán Harvey devastó la costa sudeste de Texas y porciones de Louisiana, vertiendo hasta 60 pulgadas de lluvia en menos de una semana. Los daños fueron estimados en más de $125,000 billones y un millón de carros fueron inundados a tal grado que quedaron inservibles. En el término de días, voluntarios bautistas del sur comenzaron a movilizarse para llenar las necesidades físicas y espirituales de residentes agobiados por la inundación y el viento.
Las iglesias donde se llevarán a cabo los eventos especiales de aniversario incluyen Coastal Church en Rockport, First Baptist Church en Humble y Calvary Baptist Church en Beaumont.
Las iglesias impactadas por Harvey “acaban de atravesar lo peor en el mundo. Ellas no tienen nada más a qué acudir, pero nosotros les podemos dar esperanza en Jesús,” dijo Frank Bailey, voluntario de Livingston para Alivio en Desastres de la SBTC, después de haber sido desplegado el año pasado.
Los capellanes de AD jugaron un papel esencial en ayudar a los residentes a superar sus pérdidas, yendo puerta por puerta por los vecindarios ofreciendo apoyo espiritual y dirección hacia los recursos. Los voluntarios de Ayuda en Desastres de la SBTC distribuyeron 445 Biblias y 526 tratados, presentaron el Evangelio 494 veces, hicieron 1,667 contactos espirituales y registraron 135 profesiones de fe.
Una estrategia coordinada durante el año pasado involucró a Alivio en Desastres de la SBTC, Alivio en Desastres de Texas, y grupos de reconstrucción de Texas, unidades de AD y otros voluntarios de 30 convenciones bautistas estatales y de los equipos de Envía Alivio de la Junta de Misiones Norteamericanas, con edades de entre 16 y 96 años.
Armondo Hernández, de 27 años, veterano del despliegue de limpieza de lodo a Nepal hace dos años, y en su primer despliegue de alimentación para Corpus Christi, lo llamó “humildad” al ver a “hombres mayores, la mayoría con más de 70 años trabajando no solamente gratis sino con intensidad, y por ninguna otra razón que no fuera sentir que ellos tienen el llamado de Dios para servir.”
Él era parte de un equipo de la First Baptist Chruch de Brownsville que instaló el tráiler de la iglesia para la purificación del agua y dos unidades de alimentación de masas en la Iglesia Annaville Baptist. Fue allí donde voluntarios prepararon más de 70,000 comidas distribuidas por la Cruz Roja de Rockport, Port Aransas y otras comunidades del Golfo.
Iglesias afiliadas a SBTC y otras convenciones bautistas estatales adoptaron cerca de 75 iglesias que sufrieron daños en la tormenta, y las ayudaron a recuperarse para un futuro ministerio.
La First Baptist Church en Waskom, Texas, contactó a la SBTC para explorar el programa Adopte una Iglesia y fue conectada con la First Missionary Baptist Church de Nome, que había sido severamente dañada por la inundación.
Otras iglesias de la SBTC habían ayudado a la First Missionary con necesidades inmediatas el pasado otoño, incluyendo la Inglewood Baptist en Grand Prairie y Faith Memorial Baptist en Jacksonville. El esfuerzo unido en el curso de seis meses hizo posible llevar a la congregación de regreso al edificio de su iglesia para el domingo de resurrección. El lugar estaba abarrotado.
La SBTC recibió más de $2.8 millones de individuos, organizaciones y entidades de los bautistas del sur, convenciones estatales e iglesias para financiar los esfuerzos de recuperación. Casi todos los fondos han sido desembolsados, y proveyeron $2,213,000 para subvencionar iglesias y pastores, y otros $503,179 para llenar otras necesidades.
La Trinity Baptist Church de Vidor, Texas, es típica de esas subvenciones recibidas, tras soportar poco más de un metro de agua a lo largo de sus instalaciones.
“Dios nos ha bendecido grande e inmensamente,” declaró el pastor Marvin Fuller después de que el santuario y las oficinas fueron restaurados. “Estamos progresando, pero la paciencia es una virtud y hemos tenido un largo camino por recorrer.”
Trinity Baptist está en la etapa temprana del programa de revitalización de iglesias de la SBTC.
Houston Northwest Baptist Church sufrió una extensa inundación de uno a tres metros de agua a lo largo de su edificio, excepto por el centro de alabanza. El edificio de los niños fue tan severamente dañado que fue demolido. El edificio estudiantil fue remodelado como casa guardería, para necesidades especiales y para estudiantes de primaria, mientras los adolescentes utilizaron una tienda.
“Los dólares de la SBTC para subvenciones son grandemente apreciados y usados para nuestro ministerio y la reconstrucción de instalaciones,” señaló Alan Bugg, pastor administrativo. “HNW está al momento en las etapas de la remodelación del edificio de administración y en la construcción del nuevo edificio de los niños,” reportó a principios de este verano.
El dinero para subvención también ayudó a la iglesia a recobrar el costo del único centro de abastecimiento en Houston al que se accede en auto.
“Familias literalmente condujeron sobre el campus donde teníamos varias tiendas con suministros. Ellos nos decían su necesidad y nosotros cargábamos sus vehículos,” dijo Bugg.
La iglesia se involucró en remoción de lodo en cientos de casas, les proveyó gastos para vivir a corto plazo a muchas familias y envió equipos para ayudar en el proceso de reconstrucción. Más de 1,000 bolsas de ropa fueron lavadas para víctimas de inundaciones.
Iglesias de todos los tamaños fueron bendecidas por el flujo de apoyo de todas partes del país a través de la SBTC. Desde First Baptist Church en Katy, Texas, hasta la congregación camboyana de Metrey Phea Baptist en Houston, los fondos ayudaron a iglesias a comprar suministros para reconstruir instalaciones dañadas.
Richards expresó gratitud por la generosidad de los bautistas del sur.
“Las convenciones bautistas estatales recibieron fondos de sus iglesias para ser enviados para Harvey Relief,” añadiendo que muchas convenciones estatales escogieron distribuir esos fondos a través de la SBTC. “Estamos agradecidos por nuestra asociación en el Evangelio con nuestras convenciones estatales hermanas. Ellas hicieron posible, junto con las generosas donaciones de otros, ayudar a reconstruir iglesias y a llevar a pastores de regreso a sus hogares.”
Voluntarios de Alivio en Desastres de Texas fueron desplegados 8,612 días de voluntariado y cronometraron 86,120 horas voluntarias. Durante ese tiempo, ellos sirvieron 298,431 comidas a los servicios de emergencia y a las víctimas del huracán. La SBTC operó 762 sitios de limpieza y recuperación, proveyó cuidado a 22 niños, y facilitó 9,600 duchas y 6,760 tandas de lavado.
Voluntarios de 30 convenciones estatales que trabajaron en el área afectada por el huracán sirvieron 2.1 millón de comidas a los servicios de emergencias y los evacuadores, facilitaron 41,000 duchas, manejaron 26,000 tandas de lavado y completaron 1,942 órdenes de trabajo de remoción de lodo. Las 529,000 horas de servicio voluntario de los equipos de alivio en desastres de todo el país están valoradas en $12.1 millón.
