¿Cuándo pensamos hacia el futuro, está tu corazón lleno de temor o de fe? Hay muchas cosas en este mundo que nos puede llevar a pensar en lo negativo. Ya ha pasado más de un año que la pandemia llegó y afectó a toda persona mundialmente de alguna manera. Cada día vemos malas noticias en vez de ver buenas noticias. Por eso es importante tener una fe firme en Dios y saber que nuestra fe agrada a Dios.
“Es pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios. Pero sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”. Hebreos 11:1-6
Nuestra vida cristiana es caracterizada en tener una vida llena de fe. Cuando confiamos completamente en Dios estamos ejerciendo una fe fuerte y firme. Debemos escuchar y obedecer la voz de Dios en todo tiempo. Pero eso requiere una acción fuerte de nuestra parte. Tenemos que venir y apoyarnos completamente en Dios para tener una fe firme.
La Escritura nos dice: “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas”. Proverbios 3:5-6
Todos somos tentados en confiar en nuestra propia sabiduría humana y creer que lo sabemos todo. Pero Dios desea que dependamos totalmente en Él y saber que Él es la verdad.
Primero tenemos que estar seguros de que somos salvos por Cristo Jesús para ejercer una fe firme. Si no tomamos ese primero paso nunca vamos a poder vivir una fe firme. Tenemos que reconocer que Cristo es el único que nos puede dar la salvación eterna. La epístola del apóstol Pablo a los Romanos nos da las pautas correctas para recibir a Cristo como Salvador y saberlo con seguridad.
“Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esto es, la palabra de fe que predicamos: que, si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación. Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo. Así que la fe viene del oír; y el oír, por medio de la palabra de Dios”. Romanos 10:8-10,13,17
Vivir una fe firme en Cristo nos da una vida llena de alegría y de mucho gozo aun cuando estamos pasando tiempos difíciles en nuestras vidas.
Santiago 1:2-3, dice: “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia”.
Tenemos que vivir una fe firme en Dios porque esto le agrada al Señor.
Debemos siempre buscar a Dios y hacer Su voluntad.
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