Mateo 24:14 registra estas palabras de nuestro Señor: “Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin”.
Debido a que los bautistas del sur están comprometidos con un fundamento establecido en la Palabra de Dios, nuestra Junta de Misiones Internacionales (IMB) adopta una misionología bíblica. Como resultado, la abrumadora mayoría de nuestros recursos en la IMB están dedicados a llevar a cabo la Gran Comisión de hacer discípulos de todos los pueblos y a administrar la visión de Apocalipsis 7:9 de “una gran multitud…de todas las naciones, de todas las tribus y pueblos y lenguas de pie ante el trono y ante el Cordero”.
En la práctica, ¿qué significa esto? En lo que respecta a nuestros equipos misioneros, el 91 por ciento se enfocan en alcanzar a etnias que se ajustan a la definición de “no alcanzados” — menos del 2 por ciento de su población es cristiana evangélica. Compartimos el corazón de Dios expresado en 2 Pedro 3:9, “no queriendo que nadie perezca”, pero también vemos una y otra vez la advertencia de Jesús de llevar el evangelio a toda nación. Por lo tanto, damos prioridad a aquellos que están pereciendo sin un testimonio del evangelio entre su etnia. Con respecto a la mayordomía financiera de la IMB, cada dólar dado directamente a la IMB o dado a través de su iglesia y designado a la IMB se utiliza en el extranjero. Y la mayor parte de los recursos financieros de la IMB apoyan a los equipos misioneros que se dedican a las etnias no alcanzadas con el evangelio de Jesucristo.
Estoy personalmente agradecido por cada agencia misionera evangélica que busca llevar el evangelio a las naciones. Sin embargo, cuando se trata de llegar a los no alcanzados, ningún grupo o denominación que yo conozca se acerca al compromiso de invertir el dinero como los bautistas del sur para llevar el evangelio a los no alcanzados. El trabajo que los bautistas del sur están haciendo al cooperar en el envío de misioneros a través de la IMB está llegando al borde mismo de la perdición.
Solo el año pasado, los misioneros de la IMB y sus compañeros bautistas en el extranjero involucraron a 55 etnias que anteriormente no participaban. En algunos de esos casos, hemos visto a los primeros creyentes llegar a la fe y a las primeras iglesias plantadas en la historia de esas etnias. Podemos gozarnos de que podremos mirar a nuestro alrededor cuando estemos ante el trono de Dios – ese día cuando la visión del cielo se haga realidad – y ver a nuestros hermanos y hermanas en Cristo de esas etnias.
Por ahora, la visión todavía no se ha cumplido. Más de 7.200 etnias siguen sin ser alcanzadas y más de 3.100 todavía no se han comprometido con el evangelio. Cada día 155.473 personas mueren alrededor del mundo. La Palabra dice que hemos sido dejados aquí para hacer discípulos de todas las personas, para ser testigos de Jesús hasta el final de la tierra, para proclamar el evangelio del Reino a través de todo el mundo como un testimonio a todas las naciones. Y recuerden, como bautistas del sur estamos profundamente comprometidos a seguir las enseñanzas de la Biblia.
